A 17 años de la muerte del padre Ernesto Martearena, rendirán homenajes en su memoria

Un lunes 8 de octubre de 2001, Salta se vió conmocionada por el brutal asesinato del padre Ernesto Martearena, en la parroquia Nuestra Señora de Fátima, quien recibió 17 puñaladas, murió desangrado. El cuerpo fue prendido fuego, atado a su propia cama, en un intento de borrar las evidencias por parte de los asesinos.

La cruel muerte del sacerdote se vio envuelta de un paño de dudas que hoy perdura entre quienes lo conocieron. A 17 años de su muerte, se realizarán actividades para recordarlo y homenajearlo, bajo el lema “No dejaremos que te olviden”.

Los homenajes iniciarán en la plazoleta Padre Ernesto Martearena, donde se encuentra el busto del religioso mariano, en la intersección de calles España y Junin.  Javier Mamaní  brindó detalles de las acciones que se realizarán.

“Es una jornada llena de buenos recuerdos, lindas vivencias que tuvimos con el padre. No dejamos de recordarlo, hoy con el lema ‘No dejaremos que te olviden’. Pasaron 17 años y la gente tiende a olvidarse. Esta tarde vamos a reunirnos, a partir de las 17:30 horas, para hacer un homenaje para que la gente pueda recordarlo y aquellos que no lo conocieron, que conozcan sobre su vida”, dijo en InformateSalta.

La hermana Gregoria, una de las primeras compañeras de misión, lo recordó muy emocionada e incitó a la comunidad a mantener vivo el recuerdo del sacerdote. “Empecé con el padre a trabajar en Villa Asunción, donde estaba uno de los primeros asentamiento, él quería misionar y llegar a la gente. Tuve la invitación de él para ayudarlo. Hoy sigo con sus obras, con el comedor y la guardería que él fundó”, manifestó Gregoria.