Se acrecienta la crisis tabacalera, sin producción, sin reactivación y con un futuro incierto

La situación de la producción tabacalera se encuentra en un parate que, con el paso de las horas y los días, deriva en una crisis que genera angustia sobre su futuro. Con las fábricas cerradas en el marco de la cuarentena, la falta de cigarrillos y el desencadenante a la venta ilegal, los pedidos de flexibilización para el rubro, y sin novedades por el momento, el futuro en la actividad es cada vez más incierto.

La angustia llegó hasta las cámaras comerciales más importantes. Eduardo Rodríguez, titular de la Cámara Regional de la Producción y director de Economía Regionales de la CAME, en declaraciones al Nuevo Diario resaltó la grave situación en el sector tabacalero, lo que también afecta al Estado en materia de recaudación impositiva.

“Hasta que no se solucione el problema de la apertura de la fábrica de Philips Morris en Merlo, estamos bastante complicados porque tenemos dos problemas, el primero se debe a que el tabaco no llega a esa planta”, aseveró Rodríguez quien agregó como otro problema “la recaudación, tanto del Fondo Especial del Tabaco como del mismo Estado”.

Según explicó “en un paquete de cigarrillo, el Estado tiene el 90% de impuestos”, dando a entender la veracidad del dinero que no entrará a quedará en la recaudación. Así, el panorama es muy complicado, pues por un lado no tiene recaudación ni tampoco puede recibir nada del FET, porque tampoco recauda. Como si fuera poco, otro factor que perjudica a las empresas regionales es el acceso a créditos bancarios con una tasa acorde, situación que pone el riesgo la posibilidad de cumplir con el pago de sueldos de miles de trabajadores.

En vista a esta situación, Rodríguez adelantó que ya se realizaron gestiones al respecto. “Desde la Cámara Regional de la Producción, la cual mantiene muy buena convivencia con la Cámara del Tabaco, hemos estado realizado acciones de forma conjunta para solucionar este inconveniente, tanto con legisladores como con funcionarios nacionales”, indicó.

“La cadena de pago irremediablemente va a un corte”, lamentó el director regional quien agregó: “Estamos con bastantes dificultades. Nosotros, todas las quejas que tenemos, es que no se puede llegar a pagar los sueldos, eso es una gran complicación”.

Por otra parte, remarcó que la presión tributaria se advierte sobre todo “en lo que es la energía y combustibles. Son costos que están por las nubes, mientras tanto nosotros seguimos vendiendo nuestros productos a los mismos precios. Un ejemplo de ello, es lo que sucede en la vitivinicultura; el año pasado estaban vendiendo al precio de 2018 y ahora tienen toda la producción y no tienen a quién venderla”.

En ese aspecto, Rodríguez puntualizó que en el sector tabacalero aún existe el temor respecto a la venta de todo el tabaco estacionado en las instalaciones de la Cooperativa de Productores de Tabaco. Salta, como en todas las provincias, estuvo parada y llegó a tener 37 millones de kilos sin procesar, una producción que desde hace una semana volvió a reactivarse; aunque ahora, con el cierre de la fábrica en Merlo, todo se volvió a complicar.