¿Salta, sin barbijo en la calles? “Para ralentizar el virus, no es momento de levantar su uso”

Este viernes termina la vigencia del último Decreto de Necesidad de Urgencia respecto al manejo de la pandemia del coronavirus y tal como lo adelantó días atrás el Gobierno Nacional, dejaría de ser obligatorio el uso del barbijo en espacios abiertos, medida que se replicaría en Salta.

Así lo dejó entrever el ministro de Gobierno, Ricardo Villada. “Si la legislación nacional así lo establece nosotros no tenemos marco en que apoyarnos”, expresó deslizando que si la medida es nacional, difícilmente puedan no acatarla en el territorio salteño.

Ante esta posibilidad InformateSalta consultó al doctor Marcelo Nallar, gerente del hospital Arturo Oñativia quien reafirmó que aún no es momento para dejar de usar el protector facial, considerando la necesidad de que este elemento ayude en la prevención de la enfermedad como en mitigar su propagación.

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“Esto ya lo charlamos, uno busca ralentizar la circulación viral, primero (fue) con la cuarentena de personas que venían de afuera para ralentizar la llegada del virus; el virus llegó, está entre nosotros, entonces ahora se debe buscar ralentizar la circulación”, reflexionó primeramente.

A esto y para esa misión de lentificar las cepas, Nallar sentenció que “son importantísimas las medidas personales para cuidarnos, como el tapabocas que es uno de los factores fundamentales”, junto a la distancia entre personas como evitar las reuniones en ambientes centrados o no ventilar los espacios.

“El tapabocas es uno de los principales factores del cuidado personal; ahora que se busca ralentizar la circulación, no es momento de levantar su uso, eso no surge de un razonamiento lógico sanitario en esta etapa”.

En este punto el doctor destacó que se pueda avanzar con la vacunación a menores sin comorbilidades. “Todo lo que sea vacunación es buena noticia, ha sido uno de los pilares que nos ha situado en esta situación de tranquilidad, mientras mayor sea la gente vacunada mejor nos va a ir desde lo epidemiológico”, consideró el gerente.

Así mismo subrayó que la inoculación de las personas, sumándose ahora los jóvenes, debe ir acompañado por el comportamiento social. “Si se respetan las normas evitaremos la propagación de la enfermedad, son todos factores que colaboran en la disminución de casos”, expresó para concluir.