El Banco Santiago del Estero fue imputado por trato indigno y prácticas abusivas, tras una inspección llevada a cabo por la Secretaría de Defensa del Consumidor de la Provincia de Salta.
Durante la inspección, se observó que los clientes se vieron sometidos a largos tiempos de espera que oscilaban entre 2 y 4.30 horas para ser atendidos por ventanilla, superando el límite establecido por ley.
La normativa considera trato indigno y práctica abusiva cualquier espera que exceda los 30 minutos para ser atendido y los 60 minutos cuando se provean asientos, existan instalaciones sanitarias y el orden de atención sea según el talón numerado.
Además, se encontró que los tickets o talones de turnos entregados a los usuarios no indicaban el horario real de ingreso al local, incumpliendo la ley que exige esta información.
En cuanto a los cajeros humanos, se detectó que solo se habían habilitado 13 ventanillas para la atención al público, a pesar de que el Banco cuenta con un total de 23 ventanillas o cajeros en sus dos salones de atención.
Aunque los diez cajeros automáticos estaban operativos, su límite de extracción diario es de $50.000 por usuario, lo que obliga a aquellos que desean retirar más a volver al Banco y/o hacer fila para sacar la totalidad de su dinero por ventanilla o para presentar una solicitud de ampliación de límite para sacar por cajero.
Finalmente, se constató la ausencia de cartelería indicativa sobre la Atención Prioritaria para grupos vulnerables, como embarazadas, personas con niños pequeños, adultos mayores y personas con discapacidad. Tampoco se exhibió la cartelería del libro de quejas en un lugar visible ni cumplió con las medidas reglamentarias.
Ante esta situación, se inició un sumario al Banco Santiago del Estero en defensa de los derechos de los consumidores establecidos por la Ley 24.240 y la Ley Provincial 7800.