Durante un acto en la cual encabezó la entrega de sables, el presidente Javier Milei dio un discurso en Casa Rosada, en el cual hizo un balance de su primer año en gestión en materia de seguridad, indicando que seguirán respaldando el actuar de las fuerzas que combaten el crimen y garantizando el orden público.
Primeramente, hizo críticas a las gestiones presidenciales anteriores que "puso victimarios en lugar de víctimas, en medio de esa puja ridícula, las fuerzas de seguridad quedaron desamparadas por un Estado que las ninguneó, liberando presos y castigando policías que hicieron bien su trabajo"
Indicando que es su intención un giro de 180°, enfatizó que "el orden público es sagrado, los buenos son los de azul, los malos son los delincuentes". Dicho esto recalcó que el Estado debe proteger a las víctimas y castigar a los victimarios: "Esos pilares han logrado civilizar la barbarie en la historia y que nos están trayendo resultados positivos en este primer año de gestión, de la mano de Patricia Bullrich".
Algo de lo que se mostró disconforme es que, en las últimas semanas, tomó conocimiento que presos, usando la identidad de género, pretendían argumentar que eran mujeres que debían estar en cárceles de mujeres "para aprovechar de ellas o continuar sus negociados", según protestó.
Como adelanto, anticipó que impulsarán como medida que delincuentes ya no puedan solicitar un cambio de penal bajo identidad de género, haciendo que los sistemas penitenciarios provinciales adhieran. "Esa estupidez se termina", sentenció.
Por último manifestó: "La seguridad pública es indispensable para el crecimiento del país, las leyes separan a los hombres de las bestias y deben ser cumplidas, le decimos sí al orden cívico, vamos a respaldar a las fuerzas de seguridad las veces que haga falta", concluyó.
"El delito hay que castigarlo en todo momento y lugar, se acabó el 'viva la pepa'"