Solidaridad: Necesitan una silla postural para mejorar la calidad de vida de Martina

Daniela Frías, mamá de Martina, contó en InformateSalta que hace cuatro años y medio están esperando la silla de ruedas que iban a recibir de la obra social Profe, pero el organismo le rebota los papeles y siguen esperando, mientras la salud de la nena de deteriora.

“No tengo ayuda de nadie. Trabajamos independientemente y alquilamos una vivienda, pero cada vez nos sube más el alquiler. Recibimos la pensión de Martina, mi marido trabaja en una carnicería en negro y yo alquilo un carrito para vender sándwich. Tenemos otra bebe de 6 meses. Tratamos de buscar una vivienda más económica, pero necesitamos ciertas condiciones para Martina”, sostuvo la madre.

Según contó la mujer, están inscriptos en el IPV hace cinco años, pero los ingresos no son los requeridos por el organismo para ingresar a los sorteos del cupo por discapacidad: “Yo no pido que me regalen, yo solo pido acceder a una vivienda y pagarla con el dinero del alquiler, para que mi hija tenga comodidad, porque en la situación de hoy en día ya no podemos pagar alquiler”.

Sumado al retraso madurativo y la epilepsia, Martina tiene bajo peso. No habla, pero se expresa con gestos. “No la puedo llevar a la escuela porque el colectivo la descompone. Estuvo yendo a Hirpace, pero necesitamos la silla postural que sale $50 mil, pero no tenemos esa plata. Toma pastillas para no convulsionar, pero cuando la obra social no tiene las tenemos que comprar”.