Un conflicto que ha tomado su resonancia, protagonismo y ha sido hecho de múltiples noticias como problemáticas ha sido el de los asentamientos, siendo uno de los más preocupantes el que se instaló lindero a Parque La Vega, en la zona sur de Salta Capital.
Tras ocho meses de peleas, reclamos, denuncias por inseguridad, entre otras situaciones, las personas asentadas en el terreno habrían resuelto su retiro del lugar desde este lunes, tras un acuerdo al que llegaron con el Gobierno de la Provincia.
Según la información que comparte el diario El Tribuno, el convenio que busca darle fin a la ocupación se logró tras casi un mes de negociaciones entre delegados de los asentados y funcionarios de la Secretaría de Tierras y Bienes del Estado y mediadores de la Secretaría de Justicia. A esto se suma la lluvia, ya que el predio es inundable y las edificaciones de lonas y plásticos no resistieron las inclemencias meteorológicas.
Fue el jueves que se firmó un acuerdo general entre los negociadores para la desocupación del terreno y este viernes se comenzó con los acuerdos individuales, que algunas familias no firmaron porque no estaban en el predio. La desocupación, paulatina, comenzó el mismo día del primer convenio.
El matutino agrega que también se resolvió una asistencia a cada caso particular. Quienes puedan ir a la casa de un pariente contarán con la ayuda con materiales para edificar una ampliación, otros recibirán asistencia alimentaria y también habrá asesoramiento jurídico, por citar ejemplos. También existe el compromiso de que no tendrán el antecedente de usurpación.
En el medio, hubo una demora en el arreglo para dejar el terreno que había sido por los intereses mezquinos de grupos políticos que intervenían en la usurpación. “Vimos que en un momento había algunos intereses políticos dentro del asentamiento y eso se fue de a poco depurando. Con el paso del tiempo se fue corriendo la parte más política que estaba impulsando el asentamiento y ahí pudimos conversar de otra manera con los asentados”, señaló Matías Posadas, secretario general de la Gobernación, al medio citado.
Por su parte el secretario de Tierras y Bienes, Esteban Carral, declaró al diario que “las familias que quedaron en el asentamiento sufren muchas necesidades y las respuestas que les estamos dando no son diferentes a las que el Estado brinda a familias en la misma situación”. A esto sumó que los asentados tendrán las mismas oportunidades que cualquier otra persona que está inscripta para recibir un terreno o vivienda por parte del Estado.