Tras la muerte de Leonel de 11 años en B° Solidaridad este medio tuvo acceso a la denuncia por maltrato radicada hace cinco meses por el vicedirector de la escuela a la que asistía el menor. Pese a ello, la policía ni la justicia actuaron en consecuencia para evitar el fatal y triste final de Leonel.
A casi dos semanas de la muerte del menor , cuya carita sonriente con su uniforme de militar, conmovió a todos, este medio, de manera exclusiva, pudo acceder a la denuncia radicada el 17 de marzo por el vicedirector de la escuela Ara General Belgrano, Fabio Marega.
La docente se presentó en la Comisaría 17 de barrio Solidaridad, donde expuso lo que habían descubierto ese mismo día, a las 8.45, cuando Patricia Villarroel, la maestra de Leonel, lo alertó sobre una situación que el alumno había revelado y la que ella pudo constatar al ver las lesiones que presentaba.
Según la denuncia, a la que accedió InformateSalta, consignada con el número 291 de Violencia intrafamiliar, la docente interrogó a Leonel por una notificación que le había enviado el día previo a su madre, mediante la cual les pedía a los padres del chico que hablaran respecto a cómo mejorar su conducta.
Al pedirle la nota firmada por sus padres, Leonel no anduvo con rodeos y respondió: “Me dieron una cagada”. Ante esta revelación, la docente observó que el alumno presentaba lesiones en sus manos, lo que fue suficiente para iniciar el protocolo que los establecimientos educativos tienen para estos casos.
Docentes y vecinos coincidieron en que Leonel era maltratado
Tras la denuncia de la Directora y como lo establece el protocolo escolar el vicedirector se presentó en la dependencia policial a las 10.20 y reveló el maltrato que padecía el menor, quien cursaba el sexto grado en esa escuela.
El relato brindado por el directivo no fue muy extenso, pero sí suficiente para revelar todos los indicadores de riesgo que se cernían sobre Leonel, quien lejos de ser objeto de medidas inmediatas que lo pusieran bajo protección, fue el blanco de nuevos maltratos físicos.
La denuncia coincide con el relato que los mismos vecinos de Leonel relevaron tras conocerse la horrible muerte del niño, quien ingresó al hospital Papa Francisco el 31 de agosto pasado, sin signos vitales.
La versión de la madre, que es quien llevó al menor hasta el nosocomio el día del fallecimiento fue poco creíble, la mujer indicó que su hijo se había caído del segundo piso de la casa, la que posee tres plantas.
Al ser interrogada respecto a más detalles de la caída, la mujer dijo que ella no había visto nada y que fue su hijo quien reveló tal situación, sumado a esto esta el hecho de que tras la caída le habría permitido que se fuera a dormir y recién al día siguiente notó que no reaccionaba y fue ahí que lo llevó al nosocomio, pero ya sin vida.
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