Tema que permanece en la opinión pública es lo ocurrido hace unos días, cuando desde la Municipalidad y la Policía procedieron al despeje de vendedores de carros fruteros de avenida San Martín y calle Ituzaingó, tras un episodio violento que protagonizaron, e incluso encontrándole “facas” al momento de retirarlos del lugar.
Mientras se define el futuro de los demás vendedores informales de estas frutas y verduras, la sociedad no tardó en hacerse eco de lo ocurrido, con las opiniones a la orden del día, la gran mayoría a favor del despeje de estos carreros, ahondando en malas conductas de los mismos, inclusive acoso a la gente.
Muchas de estas opiniones se vertieron a través de las redes sociales de InformateSalta, con los comentarios de los usuarios, lectores y amigos de nuestro medio, que en gran cantidad dieron su visto bueno a la acción, enumerando las problemáticas que causaban a los transeúntes del microcentro.
“Se acabó la Argentina de los vivos, de los que se ponen puestos en el centro sin pagar impuestos”; “Hermoso, (estamos) hartos de estar esquivando viendo que se adueñan de las calles”; “O se vive en una cuidad civilizada y organizada donde se pagan los impuestos, o se vive en la selva”, son algunas de las manifestaciones a favor.
Hubo otro que plantearon los inconvenientes con estos fruteros, como ser: “Cortan la vía pública, APARTE que pasas x ahí y te dicen cosas asquerosas todos los que tienen esos carros”; “Siempre evite esa esquina porque son unos desubicados, por eso me parece perfecto que los hayan sacado”; “Eran unos atrevidos algunos, pasan mujeres y les dicen asquerosidades y las incomodan, a mí me pasó”.
Vale sumar a quienes respaldaron el despeje, pero igualmente plantearon la situación laboral de estos vendedores. “Es triste ver esto, porque es el sustento de una familia.... Pero la gente tiene que cambiar la cabeza y entender que hay reglas para comerciar”; “Era hora, parecía un caos de verduras en las esquinas, pero pobre gente la verdad, estaría bueno que le den trabajo”.
“Tienen que trabajar en un lugar habilitado y no en la vía pública”