Envidia, mala fe o ambas

Los cronistas de El Tribuno parecieran haber desarrollado capacidades predictivas lo que traducido en periodismo quiere decir que no experimentan una de las condiciones elementales de la profesión que es el abordaje informativo desde la curiosidad, casi como un científico que se aproxima al objeto de estudio.

Pero la soberbia del dueño del diario (para el que aún no lo sabe el diario El Tribuno es propiedad de Juan Carlos Romero) parece haberse contagiado como un virus (del mal) entre su plantel de periodistas que han comenzado a caer en los mismos lugares comunes.

Entonces, lo que es un anuncio importantísimo como la extensión del beneficio del boleto gratuito para el interior es para los periodistas de El Tribuno un anuncio casi de colapso de la Provincia.

Como nunca antes los periodistas de El Tribuno parecieran estar preocupados por el lugar de donde saldrán los fondos para sostener el beneficio de gratuidad. Nunca antes se preocuparon sobre la procedencia de los dineros públicos cuando Romero era Gobernador y anunciaba obras que beneficiaban a sus empresas o a sus amigos. En ese momento, claro, los periodistas de El Tribuno respondían con un reverencial “sí, bwana” a las órdenes y mandatos de Romero.

Pasaron del sí a pienjuntillas a una etapa en la que deben oponerse por el sólo hecho de hacerlo para que el principal lector de los diarios experimente una suerte de placer orgásmico leyendo y disfrutando como antes hacía cuando los titulares ensalzaban su gestión. Ahora disfruta desacreditando lo hecho por el gobierno provincial porque él ya no ocupa el sillón del Grand Bourg, así de sencillas son las causas por las que el diario asume el papel de órgano oficial del romerismo (al fin y al cabo siempre fue así).

Entonces ya ni cabe cuestionar los contenidos del diario El Tribuno. Al fin y al cabo, en algún lugar del planeta, Juan Carlos Romero estará siendo feliz como un niño con cajita, sólo que esta le costó mucho durante mucho tiempo al Estado. Pero claro, de eso no se habla, ¿no?

Fuente: www.informatesalta.com.ar