Cascadas en Argentina que muy pocos conocen: de película

Las cascadas Santa Ana y Dora son una de las excursiones claves del turismo de Villa La Angostura y el verano es el mejor momento para visitarlas. A ellas se llega por la ruta Internacional a Chile y es el espacio para hacer trekking que tiene una duración de aproximadamente siete horas. Allí se recorren senderos que atraviesan diferentes tipos de bosques y se llega a los dos saltos de agua.

El comienzo del sendero a ambas cascadas está ubicado sobre la ruta 231 que cruza a Chile por el Paso Cardenal Antonio Samoré. Habitualmente, hay que cruzar la aduana argentina y seguir unos 13 km para llegar. En el marco del contexto sanitario actual por la pandemia de Coronavirus, se está a la espera de la decisión del gobierno chileno de realizar la apertura para poder ingresar; la cual fue suspendida por el avance de las nuevas cepas.

La Cascada Santa Ana es un salto de agua de 40 metros que está ubicada en Villa La Angostura muy cerca del límite con Chile y es un punto clave del turismo.

Se recomienda ir con tiempo y bien temprano, ya que hay que avisar a gendarmería que se está haciendo turismo y presentar DNI.

La Cascada Dora

El inicio del recorrido es muy tranquilo y en la entrada al bosque húmedo después de una caminata de aproximadamente media hora se encuentra la bifurcación del camino. En el cartel ubicado allí si se toma el camino de la izquierda se accede a la cascada Dora. Esta es la que recomiendan visitar primero, para luego ir a la cascada Ana. Pocos metros después se llega al río Pireco, no sin antes descender por un barranco resbaladizo. Y a pocos metros ya se puede observar la amplia caída de la cascada Dora.

 
La Cascada Ana

La mayor particularidad de esta cascada es su entorno, ya que cae de una cornisa de basalto de unos 40 metros de altura. Además de la posibilidad de ver la cascada desde la base, lo mejor es subir, en una caminata de unos 20 minutos, a la caverna que se encuentra detrás del salto y de esta forma tener otra perspectiva completamente diferente.

La época más recomendada para hacer el trekking a la Cascada Dora y Santa Ana, según la gente que suele hacer turismo, es el el verano, después de los deshielos cuando el curso del Río Pireco baja y antes de las lluvias del otoño-invierno (de diciembre hasta abril). Este sendero tiene una dificultad media que dura entre 3 a 5 horas de caminata entre ida y vuelta.