“Hace 10 días que no pego un ojo tranquilo”, fueron las palabras que eligió Leonardo “Tano” Isola, voluntario en la búsqueda de Gastón Sanz, para retratar a InformateSalta los dramáticos momentos que se viven sin dar con el paradero del joven desaparecido desde el domingo 20 de febrero.
“Sabemos que está en algún lado y hay que ir a buscarlo. Esto es algo que no va a parar, la gente va a seguir saliendo, se va a seguir perdiendo, creemos que podemos seguir siendo útiles y para eso hay que ordenar todo esto”, dijo.
En este sentido, detalló que su grupo de rescatistas voluntarios se enteró de la búsqueda el martes de la semana pasada y estuvo presente en diferentes oportunidades, siempre que sus trabajos y responsabilidades se lo permitieron.
“En distintos momentos y días fuimos participando desde el martes de la semana pasada, y metiéndonos en toda la zona de Castellanos, de Lesser, en San Lorenzo. Todo lo que sea agreste y hasta el momento no dimos con nada. Siempre con la policía de San Lorenzo y con la plana mayor que en algún momento montó su radio de acción en la Quebrada de San Lorenzo, coordinando distintos lugares de búsqueda, siempre trabajando en conjunto. A lo que nosotros nos tocó, no nos tiró ninguna pista de absolutamente nada”, expresó.
Sobre la zona de búsqueda, aseguró que es muy riesgosa más aún en el verano. “El jueves de la semana pasada que estuvimos trabajando sobre el río Castellanos, teníamos que cruzarlo en determinados lugares con cuerdas, no se podía por la fuerza que trae el agua, no se puede cruzar. Y en otros tuvimos que dejar el equipo y seguir porque era imposible seguir subiendo aguas arribas sin meterse al agua. Literalmente con el agua hasta las axilas seguimos subiendo hasta que llegamos a un determinado punto donde el terreno y la hora del día ya no nos permiten seguir avanzando. Es un lugar complejo de por sí pero de por sí en esta época mucho más”, manifestó.
Sobre el grupo
Leonardo contó que son alrededor de 16 los voluntarios que convocan un grupo de WhatsApp, que se autodenominan Rescatistas Voluntarios. “No tenemos una figura oficial tampoco, eso es algo que nos preocupa. Esto se planteó con las autoridades porque estamos en una situación de riesgo grande, por lo que nos pueda pasar a nosotros”, indicó.
Asimismo, puntualizó que se autoconvocan cada vez que una persona se pierde y su participación es exclusivamente en zonas agrestes. “Buscamos en montes, cerros, montañas. Participamos en varios operativos, estuvimos cuando se perdió Analía en el cerro Pacuy y también en San Lorenzo cuando se perdió Fabiana. De hecho fuimos nosotros los que la encontramos”.
Recordó que durante la búsqueda de Fabiana, uno de los voluntarios sufrió un accidente. Una de sus piernas quedó atrapada entre dos rocas en una zona muy compleja y con mucha suerte no perdió su miembro inferior.
“Estamos intentando, desde hace un tiempo que se nos visualice, y que se nos reconozca para hacer el trabajo de mejor manera, porque todos nos comprometemos y utilizando nuestros propios recursos. Dejamos nuestro trabajo y utilizamos nuestros propios recursos, porque todo el equipamiento es nuestro, la movilidad es nuestra y el conocimiento también. Nos preocupamos en capacitarnos, la mayoría tiene al menos una certificación en este tipo de ámbitos, todos nos capacitamos en cómo manejarnos con el helicóptero, tenemos una médico emergentóloga adentro del grupo. Hay gente de montaña, gente que corre, gente que es guía, tenemos baqueanos, tenemos de todos”, afirmó.
Agregó que son conscientes que nadie los obliga a salir pero los mueve la vocación de devolverle a su familia a una persona que se perdió. Además, tienen el conocimiento y la preparación física suficiente como para poder estar varias horas, inclusive varios días, en terreno.
“Desgraciadamente hay organismos oficiales que tienen el conocimiento pero por ahí no tienen el estado físico para mantener un ritmo de marcha por 4 o 5 horas, ni siquiera por una hora. Eso nos preocupa. Como sabemos que si eso existe, pensamos que si alguna vez alguno de nosotros llega a tener un problema así, queremos que nuestros propios compañeros nos vayan a buscar porque sabemos que nos van a encontrar al momento. Todos ponen una voluntad enorme, lo mejor pero desgraciadamente no todos tenemos la misma preparación”.
Finalmente, subrayó que buscan hacer todas las capacitaciones posibles, pagando desde su bolsillo y con equipamiento propio. “Hay toda una serie de cosas que estamos pidiendo que se tengan en cuenta para que se nos reconozca”, concluyó.