Ante el riesgo de un brote histórico de dengue, el gobernador Gustavo Sáenz convocó a la Unidad Ejecutora del Plan Integral Provincial de Manejo del Dengue para coordinar esfuerzos en la provincia de Salta. Durante la reunión, Sáenz subrayó que el manejo del dengue es una “política de Estado” y destacó la importancia de trabajar de manera proactiva y con un enfoque integral, involucrando a actores sociales e institucionales en la implementación de estrategias preventivas.
En colaboración con los municipios de Salta, se firmaron convenios para coordinar acciones conjuntas y fortalecer el plan de prevención. A lo largo de la reunión, se resaltó la importancia de la participación ciudadana en la erradicación de criaderos de mosquitos, un aspecto esencial para frenar el avance del dengue. El ministro de Salud Pública, Federico Mangione, pidió responsabilidad y conciencia social, enfatizando que sin el apoyo de la comunidad, las medidas del gobierno serán insuficientes.
Las autoridades provinciales informaron que las acciones se enfocarán en reforzar la vigilancia epidemiológica, eliminar criaderos de mosquitos, promover el autocuidado y fortalecer la responsabilidad ciudadana. Mangione también anunció una importante inversión en repelentes y recordó a la población su correcto uso en horarios de mayor actividad del mosquito transmisor, de 6 a 8:30 de la mañana y de 18 a 20:30 de la tarde.
El ministro advirtió sobre la necesidad de evitar la automedicación ante síntomas de fiebre, cefalea y dolores musculares, aconsejando acudir a las guardias para un diagnóstico adecuado. Además, mencionó que el gobierno provincial alertó hace más de un mes sobre el riesgo de un brote histórico que no solo afectará a Salta, sino que podría extenderse a toda Argentina, con un impacto especial en la zona centro del país.
Por último, destacó que el objetivo principal de las acciones es prevenir un aumento exponencial de casos de dengue y evitar una crisis sanitaria. Para lograrlo, se ejecutan diversas acciones, entre las que se destacan:
• Vigilancia epidemiológica intensificada: Fortalecer el sistema de vigilancia para detectar tempranamente cualquier caso sospechoso de dengue y tomar las medidas necesarias para evitar su propagación.
• Eliminación de criaderos: Se intensifican las campañas de concientización y se realizan operativos de limpieza.
• Fortalecimiento de la colaboración interinstitucional: Se trabaja en conjunto con los municipios y otras organizaciones para coordinar acciones y optimizar los recursos.
• Promoción de la salud: Se desarrollan campañas informativas para que la población conozca los síntomas del dengue, las medidas de prevención y la importancia de acudir al médico ante cualquier sospecha.