Combatieron desde la primera línea de batalla, antes que los pacientes fueran atendidos por un médico o internados en algún hospital o clínica, son los enfermeros y profesionales del SAMEC, que trabajaron sin descanso en el año de la pandemia.
El director del Servicio de Atención Médica de Emergencias y Catástrofes (SAMEC), Fabián Argüello, dialogó con Sin Vueltas de InformateSalta, en un informe especial de balance de año: “No esperaba estar en esta función justo en una pandemia, fue un mes y medio de muchísimo estrés, todos los que estábamos en salud sufrimos un estrés terrible y nos va a llevar un tiempo recuperarnos”.
De un promedio de 250 atenciones diarias, SAMEC pasó a tener más de 1.500 intervenciones. “Nosotros estábamos siempre abocados a los accidentes, a las patologías en las calles, en los domicilios y tuvimos que cambiar la forma de atender a hacer atención médica para contener a los pacientes hasta que se consiguiera una coma, un centro para derivarlo. Se reforzó toda la flota de vehículos, pasamos de tener 11 ambulancias, autos y camionetas a 24 móviles disponibles las 24 horas”, contó.
Hoy, con una curva de contagios aplanada y con todos los esfuerzos para mantener bajas las cifras de los pacientes internados, nadie duda del heroísmo de los enfermeros. “De un día para el otro nos vimos desbordados, saturados completamente. Más allá de que haya bajado la curva del COVID, seguimos preparados, seguimos capacitándonos y haciendo acopio de equipamiento, arreglando los móviles y con toda la logística preparada por si tenemos algún rebrote”, expresó.
InformateSalta también dialogó con el supervisor de enfermería del SAMEC, Ricardo Colparis, quien manifestó que “fue un año muy duro, tuvimos compañeros aislados, casos extremos, estuvimos todos a la par trabajando y adquiriendo conocimientos. La pandemia no terminó, seguimos firmes con el propósito de cuidarnos y cuidar a la comunidad”.
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