En un procedimiento abreviado llevado a cabo en la Sala V del Tribunal de Juicio, un sujeto de 23 años fue condenado a seis meses de prisión condicional por resultar autor material y penalmente responsable del delito de abuso sexual simple en perjuicio de una vecina suya.
La jueza Mónica Faber ordenó que el condenado sea examinado por un médico del Poder Judicial para la obtención de sus señas particulares y que, a través del CIF, se le extraigan muestras de ADN, previa asignación del DUIG correspondiente, para su posterior incorporación al Banco de Datos Genéticos.
Para conservar la prisión en suspenso, el imputado deberá cumplir las siguientes reglas de conducta: fijar domicilio e informar al tribunal cualquier cambio en un plazo de 24 horas; prohibición de consumir estupefacientes y de abusar de bebidas alcohólicas; prohibición de acercarse a la víctima y a los lugares que ella frecuente en un radio de 300 metros.
Además se ordenó la prohibición de contactarse con la damnificada, por cualquier medio; realizar tratamiento psicológico y acreditar el cumplimiento de esta medida; someterse al control del Programa de inserción social y supervisión de presos y liberados.