oca, que viene de sufrir un duro traspié al perder con River en el Superclásico disputado ayer en el estadio La Bombonera, ya piensa en el partido del próximo jueves ante Palmeiras de Brasil por la vuelta de las semifinales de la Copa Libertadores.
El equipo de Jorge Almirón tendrá que dar vuelta la página rápidamente y enfocarse en el trascendental encuentro en suelo brasileño, luego de empatar sin goles en la ida en condición de local.
El "Xeneize" se entrenará lunes y martes en Ezeiza y después viajará a Brasil. El miércoles la práctica será en el Predio de Corinthians, en la ciudad de San Pablo, y allí se espera que el técnico defina el once que saltará a la cancha el día siguiente para definir su suerte en la Libertadores.
Boca disputó dos partidos claves en menos de 72 horas, pero Almirón dispuso una alineación alternativa para enfrentar a River para priorizar el duelo por el certamen continental.
No obstante, fueron varios los futbolistas que terminaron sumando minutos en el Superclásico, por lo que las próximas horas serán claves para conocer cómo se encuentran físicamente y si serán de la partida ante Palmeiras.
"Nos quedamos con mucha bronca, es un golpe fuerte, pero ya estamos pensando en el jueves. Tenemos un partido histórico, pasar a la final de la Copa Libertadores. No hace falta hablar mucho. Duele, carcome este tipo de resultados en este partido, pero hay que recuperarse rápido como siempre en la vida. No hay tiempo para lamentarse", expresó Almirón tras la derrota y al quejarse por el arbitraje de Andrés Merlos.
En esa línea, remarcó: "A pesar de que hoy fue el clásico, el partido del jueves es trascendental y es el más importante".