Salta renovó su Pacto de Fidelidad con el Señor y la Virgen del Milagro

A los pies del Monumento 20 de febrero y con un sol radiante iluminando la tarde, los fieles de Salta y del país se congregaron a aguardar la llegada del Señor y la Virgen del Milagro para hacer la renovación de su Pacto de Fidelidad. 

De manera única e inédita en la historia de estas festividades, los Santos Patronos llegaron al monumento sin las multitudinarias filas de creyentes que acompañaban su recorrido. Este año, y respetando los protocolos que demandó la pandemia, las imágenes mayores hicieron su recorrido solo precedidos por servidores de la iglesia y escoltados por efectivos de seguridad.

El recorrido se desarrolló sin inconvenientes. En cada cuadra, los fieles vieron pasar el recorrido entre lágrimas, saludos y cantos. Desde los balcones, banderas papales y familias enteras aguardaron el paso de los santos. 

Ya en el monumento, se hizo la lectura de la palabra y el arzobispo de Salta, monseñor Mario Antonio Cargnello pronunció su discurso en el que reflexionó sobre el rol de la familia, el matrimonio, la educación. Entre sus palabras apuntó también contra el aborto y apeló a que los legisladores discutan nuevamente la interrupción voluntaria del embarazo.

En consonancia a su mensaje al inicio de la jornada en la Misa Estacional, Monseñor agradeció intensivamente poder realizar este año la procesión e hizo extensiva su gratitud a quienes hicieron posible la realización de la misma.

Siendo ya las 18 hs Monseñor procedió con la renovación del Pacto de Fidelidad: “Señor, nosotros somos tuyos y tú eres nuestro”, oración que representa el fundamento de fe en las imágenes del Milagro. Los presentes en el lugar acompañaron la lectura reafirmando su fe.

“De ustedes depende que el año que viene podamos reunirnos todos” oró Monseñor, haciendo público su deseo de que la pandemia culmine pronto.  

Una vez finalizado el pacto, las imágenes procedieron a retirarse del Monumento, con destino a la Catedral Basílica. de esta forma culminan las celebraciones ya que no habrá la tradicional Misa del Peregrino que solía hacerse al terminar la jornada.