Una adolescente denunció que durante una década fue abusada sexualmente por un primo lejano suyo que padece de enanismo, a quien acusó de atacarla sexualmente en el galpón de una iglesia evangélica, en el interior del departamento Avellaneda, Santiago del Estero.
"Abuso sexual con acceso carnal" son los cargos enrostrados al sujeto por la fiscal Alejandra Sobrero, quien destinó un equipo de expertos para que analice la conducta y salud mental del acusado, de 18 años.
Todo hizo eclosión dos semanas atrás. La jovencita sufrió graves ataques de angustia y terminó revelándole a su madre que de pequeña, desde los 3 años, era manoseada y después accedida por el primo "enano".
Urgente, la Fiscalía brindó contención a la joven y después requirió la detención del sospechoso, cuya estatura superaría apenas el metro, contra el metro y casi 60 de la adolescente.
En primera persona
En Cámara Gesell, la menor habría relatado que hasta los 13 años fue abusada por el primo. Reveló que el acusado la encerraba en el galpón de una iglesia evangélica y allí la sometía, con su familia ignorante de todo cuanto acontecía.
Sin margen para la duda, la fiscal pidió la detención del sospechoso y la Justicia se lo concedió. Con ambas familias convulsionadas, la policía esposó al sujeto y lo alojó en un centro de seguridad.
En audiencia, el lunes la jueza de Control y Garantías de Añatuya, Ana María González Ruiz, fijó en 15 días más la detención del sospechoso, quien al ser indagado prefirió no hablar, asistido por el abogado Enrique Crespín.
Ahora la fiscal Sobrero trabajará con las pericias psicológicas realizadas al sujeto, quien desde hace dos semanas está aferrado al silencio y se mantiene distante de todos los comentarios del entorno en la celda que lo aloja.
En tanto, la adolescente es acompañada hoy por los psicólogos y por su familia, resueltos todos en que la contención contribuya a atenuar tamaña pesadilla sexual y le permita iniciar una nueva vida.
Habría un antecedente igual contra el acusado
La Justicia trabaja el caso del sujeto con enanismo acusado de abuso, con un antecedente similar. El joven arrastra antecedentes por otro presunto abuso sexual en perjuicio de un niño, deslizaron los voceros.
Aunque no se trató de una causa contundente, Sobrero y compañía no quieren abstraerse de ese episodio y por estos días quizá lo podría ver un grupo de psicólogos.
Hasta entonces, los funcionarios realizarán pericias psicológicas y psiquiátricas, optimistas en proveerle a la fiscal las respuestas a todos los interrogantes en que es motorizada la compleja investigación, con un desenlace más que imprevisible. /El Liberal