En el mercado informal de cambios, los dólares en las "cuevas", el denominado en la jerga dólar blue, van y vienen. Los billetes estadounidenses que circulan son de diversos diseños según pasan los años, y pese a que todos tienen validez, no en todos lados consideran el mismo precio.
En el mercado cambiario informa existe desde hace años una diferencia entre distintas emisiones del billete de dólar. Se trata de los dólares "cara chica", los "cara mediana" y los "cara grande". En las "cuevas" dicen que también los cara chica son más fáciles de falsificar y que por eso se resisten a tomarlos.
Con esa excusa es que los dólares "cara chica" o "mediana" se pagan menos que los más nuevos. Y además no es lo mismo si el billete es de 100 o de una menor denominación. Por los de baja también se paga menos.
En general se paga hasta un 5% menos por billetes de cara chica y de baja denominación que por los dólares de 100 y de cara grande.
De todas formas, la Reserva Federal reafirmó que todos los billetes emitidos sin importar la fecha son de curso legal y deben ser aceptados.
¿Qué son los dólares "cara chica"?
Los llamados dólar "cara chica" son los que se imprimieron en los Estados Unidos hasta el año 1996. En el billete de u$s100 está Benjamin Franklin dentro de un marco ovalado y que, en términos de dimensiones, es más pequeño en comparación con las versiones impresas más tarde.
Sin embargo, la Reserva Federal ratificó en varias oportunidades que los billetes son igual de válidos, de curso legal y deben ser aceptados. Sin embargo, en la city porteña persiste la idea de que es necesario reemplazarlos.
¿Cómo cambiar dólares de cara chica?
Existen tres opciones para cambiar los billetes de cara chica por los de cara grande o no perder valor con los primeros, lo que ocurriría en el caso de ir a las cuevas porteñas.
Una es depositarlos en el banco y extraerlos al día siguiente. Si bien nada garantiza que esto ocurra, es probable que el banco entregue versiones más nuevas de los billetes.
La segunda opción en depositarlos en una cuenta en dólares y usarlos para cualquier transacción que usará esos fondos. Y, por último, la tercera es, en caso de viajar al exterior, usarlos allí ya que en otros lados no presenta problemas el diseño del billete.