Aunque a nivel nacional la producción cayó un 16,9% en agosto, la situación de las PYMES en Salta es aún más crítica.
Al respecto, Miriam Guzmán, tesorera de la Cámara PYME salteña, en diálogo con InformateSalta, señaló que en la provincia “las caídas reales son del 50%" debido a la combinación de la pérdida del poder adquisitivo y el aumento de tarifas.
En la oportunidad, destacó que los índices de "estabilidad" de la inflación son "engañosos" ya que si bien algunos productos secos, como fideos y arroz, mantuvieron sus precios, los alimentos frescos registraron aumentos significativos, lo que se traduce en una disminución del consumo y una baja en la demanda de las pequeñas y medianas empresas.
En ese marco, indicó que en Salta ya se registra el cierre de 120 pequeñas y medianas empresas (PYMES) que dejaron aproximadamente a 1500 trabajadores en la calle. "¿Quién se hace cargo de ellos?”, cuestionó.
Además subrayó que el proceso para que una nueva PYME se consolide puede tardar hasta diez años.
Los sectores más afectados incluyen la industria farmacéutica, indumentaria y construcción.
En este último caso, sostuvo que las empresas no solo enfrentan la falta de nuevas obras, sino que tampoco reciben los pagos de proyectos ya iniciados.
Por útlimo, expresó su frustración ante la falta de respuesta del gobierno nacional: “No estamos en el radar del Ejecutivo".
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