



En busca de incrementar la cantidad de dólares en el sistema, el Gobierno ultima los detalles de un paquete de medidas que apuestan a que los argentinos vuelquen unos u$s200.000 millones que como se dice coloquialmente guardan "en el colchón" y, para que ocurra, el discurso oficial es que el Estado no debe indagar sobre el origen de esos fondos.
Según informa Ámbito, con este objetivo en que está focalizado el presidente Javier Milei, el anuncio estaba previsto para la semana pasada, pero se demoró. Según reconocieron en el Gobierno, aún no está la estructura jurídica para que plan funcione sin consecuencias legales y violaciones a las normativas contra el lavado de dinero.
"Me parece un horror que uno no pueda usar sus dólares libremente", sostuvo Milei e insistió con que a nadie, en especial el Estado, debe importarle el origen. "No me importa en lo más mínimo de dónde se sacan los dólares: la Justicia se tiene que encargar de lo suyo", afirmó el presidente.
A esto agregó que, desde su punto de vista, "no hay que mezclar el delito con la economía". Es decir, si los dólares están en el sistema no es un problema que deba atacar la economía. "Queremos un sistema donde la gente sea libre de usar su dinero como mejor le parezca", reiteró. "Es un blanqueo sin pago de impuestos, sí, pero es también una herramienta de libertad. Que haya competencia de monedas es parte del cambio estructural que estamos impulsando".
fuentes oficiales deslizaron que el nuevo esquema monetario podría incluir incentivos para depósitos en dólares, apertura parcial de cuentas, o flexibilización para el pago de bienes y servicios en moneda extranjera. El Gobierno busca que más de u$s200.000 millones circulen libremente.
La intención del Gobierno es estimular el uso de esas divisas sin necesidad de emitir pesos.







