Un técnico en refrigeración de 37 años, domiciliado en el barrio Bartolomé Mitre de la ciudad santiagueña de Villa Atamisqui, se encontraba “navegando” por Facebook, ocasión en la que advirtió que ofrecían repuestos de automotores de distintas marcas y las enviaban a través de encomiendas.
En ese momento, se puso en contacto con los comerciantes y le brindaron un número de teléfono de la ciudad de Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut.
El hombre guardó el número en aquel momento, hasta que el sábado 21 del corriente se decidió a comprar un repuesto para poner en óptimas condiciones su vehículo.
Se comunicó con el número de teléfono que le suministraron e inició una conversación financiera para comprar una tapa de cilindro.
Finalmente, el vecino de Villa Atamisqui y el vendedor llegaron a un acuerdo económico por $ 48 mil.
En esa circunstancia, le dijeron al comprador que debía realizar una transferencia del total del dinero para que posteriormente le enviaran el repuesto.
Asimismo, le manifestaron que el lunes, en horario administrativo, se le enviaría una copia del comprobante de lo abonado y el nombre del repuesto, además del número de seguimiento de la compra para que realizara cualquier consulta, si fuera necesario.
El atamisqueño cumplió con lo pactado, realizó el depósito del dinero y envió una foto del comprobante al vendedor, tras lo cual esperó.
Sin embargo, con el paso de los días, el técnico de refrigeración no tuvo noticias del vendedor ni de la documentación que le prometió que le enviaría. En consecuencia, se comunicó con el número telefónico y determinó que lo habían bloqueado. En ese momento comprobó que lo habían estafado.
El damnificado realizó la denuncia en la Comisaría Comunitaria Nº 20 y contó lo sucedido, aportando para la investigación las capturas de la pantalla del perfil del vendedor y de la cuenta bancaria a donde envió el dinero en efectivo. /Nuevo Diario
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