Con el correr de las horas, surgen más detalles sobre el brutal crimen del que habría sido víctima Fernando Reyes. Si bien no se pudo confirmar la identidad de los restos óseos encontrados desperdigados cerca del Río Belén, sí trascendió que la acusada, Danna Martínez, confesó a la Justicia que asesinó a su pareja, la descuartizó y luego se fue a bailar.
El macabro hecho de sangre habría sucedido en la apacible localidad belicha de La Ciénaga, ubicada al norte de ese departamento. Aparentemente, la imputada manifestó que era víctima de violencia de género y que el homicidio se habría dado en un contexto de violencia de género.
Por más de ocho horas, la sospechosa estuvo sentada frente a la fiscal Marina Villagra y aportó detalles del hecho, aunque estos no trascendieron.
Lo que sí se pudo conocer fue que ayer hubo una nueva persona arrestada. Se trata de una mujer identificada como María Villagra, quien tendría algún grado de vinculación con el atroz crimen.
Por su parte, el sujeto de apellido Toranzo fue imputado ayer por homicidio calificado por alevosía y ayer decidió guardar silencio ante la representante del Ministerio Público Fiscal.
De acuerdo a lo que trascendió hasta el momento, el macabro hecho de sangre habría sucedido el pasado 3 de diciembre, cuando fue vista por última vez la pareja jujeña, discutiendo en la ruta.
Horas más tarde, la mujer y principal sospechosa fue vista en un boliche de la zona junto a Toranzo, por lo que se presume que este habría tenido un grado de participación en el brutal hecho.
Sin embargo, ante las inconsistencias en las explicaciones que daba la sospechosa, el viernes pasado un amigo de Reyes radicó la denuncia penal por su desaparición. El fin de semana se encontraron restos óseos que habrían sido descuartizados e incinerados pero aún resta identificarlos.