Sube, sube, todo sube y sigue subiendo. En medio de los constantes incrementos que sufre el maltrecho bolsillo de la gente, en las últimas jornadas el más reciente impacto fue en el precio de los combustibles, con una actualización que pesa en los consumidores.
Es que, según dio a conocer el diario El Tribuno, desde que el precio del mercado se liberó en enero, la clase media empezó a volcarse de manera cada vez más notoria de la nafta "premium" a la "súper", combustible que miles de personas más consumen a diario en la provincia para trasladarse desde la casa al trabajo, escuelas y demás ocupaciones.
Parte de este cambio de actitud en los consumidores también se refleja en los porcentajes de incremento de estas naftas. El medio citado relevó que, hace un año, en las estaciones de servicio de YPF, el litro de nafta súper costaba $218,10, pero hoy vale $1.010 ; esta brecha se traduce en un encarecimiento de esta nafta del 363% en el periodo interanual.
Vale sumar como dato la situación de la nafta Infinia, la cual en que en junio de 2023 costaba $266 y sale ahora $1.211, el salto fue del 357%. Como si estos números fueran poco, en la comparativa, hace un año con un salario mínimo se podían cargar 331 litros y hoy solo 192.
Otro ejemplo que rescata el matutino es el caso del Diésel Infinia, que hace un año tenía en surtidores salteños de YPF un precio de $308,4 y cuesta hoy en las mismas estaciones de servicio $1.277, el encarecimiento interanual fue del 314%.
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