El hecho sucedió en Tartagal a fines de julio, cuando cuatros personas ingresaron a un local comercial utilizando una barreta para forzar la entrada.
Del comercio sustrajeron más de 20 relojes y luego se dieron a la fuga con el botín. La policía logró detener a dos de los implicados que aún tenían parte de lo robado en su poder.
La jueza Asusena Margarita Vásquez condenó a un hombre de 33 años a seis meses de prisión efectiva, revocándole una condena en suspenso. Ambas penas fueron unificadas por lo que pasará un año y medio preso. Otro de los detenidos fue condenado a seis de prisión, era su segunda condena. Ambos fueron alojados en la Alcaidia de Tartagal.
Los dos restantes, un hombre de 35 años y una mujer de 33 fueron considerados responsables de encubrimiento, y obtuvieron una condena de seis meses de prisión en suspenso.