Héctor Romero, el camionero de 71 años acusado de homicidio agravado por alevosía en el caso del asesinato y desaparición de María Cash, volvió a dar declaraciones contradictorias durante su indagatoria ante la jueza federal Mariela Giménez y el fiscal Eduardo Villalba.
Tras haberse negado inicialmente a declarar, Romero brindó su versión después de un cuarto intermedio, pero sus testimonios plantearon más dudas sobre su implicación en el crimen.
Romero aseguró que levantó a María Cash en la rotonda de Torzalito, pero las investigaciones indican que el lugar real del encuentro fue 600 metros más al sur. Además, el camionero afirmó no haber visto el rostro de la joven debido a su cabello suelto, aunque tres testigos afirman que llevaba el cabello atado en el momento de la desaparición.
También, indicó El Tribuno, mencionó que solo recordaba detalles de la vestimenta de María, lo que resulta sospechoso, dado que desde la cabina de su camión debió haber tenido una visión clara de su rostro.
El lugar donde Romero afirmó haber dejado a María también ha cambiado varias veces. Inicialmente mencionó el santuario de la Difunta Correa, pero en su última declaración dijo que la dejó en una gomería cercana. Sin embargo, la familia Crespín, residente en dicha gomería, negó haber visto a Romero o a la joven en ese lugar.
Inconsistencias en los horarios y trayectos
Romero alegó que usualmente demora tres horas en transportar mercadería desde Güemes a Joaquín V. González y dos horas y media en el regreso. No obstante, los registros de antenas telefónicas muestran que el 8 de julio de 2011 salió de Joaquín V. González a las 21:00, mientras que él aseguró haber partido a las 22:00, dejando una hora sin explicación.
Además, Gustavo Lemos, encargado de un supermercado, confirmó que vio a Romero salir del establecimiento a las 21:00, lo que contradice su versión.
Otro punto importante ocurrió el 9 de agosto de 2011, cuando los registros telefónicos ubicaron a Romero en un punto de la Ruta 16 durante más de una hora. Aunque el camionero explicó que sufrió una falla mecánica, los datos de las antenas telefónicas no coinciden con su versión, lo que aumenta la sospecha de que pudo haber regresado al lugar donde dejó el cuerpo de María.
Pruebas y nuevas imputaciones
Además de estas contradicciones, se presentó un audio en la audiencia donde Romero solicita a un testigo que no lo complique en su declaración, lo que refuerza la sospecha de que intentó influir en los testimonios. También se reveló que Romero había afirmado, en un principio, que nunca levantaba a nadie en la ruta, pero luego admitió que en ocasiones llevaba a policías y maestros, contradiciendo su declaración inicial.
Las investigaciones también descubrieron que Romero tenía antecedentes penales que había omitido mencionar, como una imputación por homicidio culposo en 2017, cuando atropelló a un motociclista. La situación de Romero se complica aún más debido a sus tres versiones diferentes sobre el encuentro con María Cash, lo que refuerza la incertidumbre sobre su versión de los hechos.
Romero, quien tiene 71 años y padece cáncer de próstata, fue detenido y se le dictó prisión preventiva mientras continúan las investigaciones. Se esperan nuevas imputaciones en el caso, y la justicia está decidida a esclarecer lo sucedido con la joven diseñadora, cuyo cuerpo nunca fue encontrado.