



Tras la publicación del INDEC del índice inflacionario del mes de febrero, también se dio a conocer el monto que necesitó una familia para no ser pobre.
El dato reside, en que por primera vez en nueve meses, la CBA subió por encima de la CBT. Esto se dio en un contexto de mayores aumentos en algunos alimentos, fundamentalmente en la carne.
La CBT aumentó 2,3%, máximo desde octubre de 2024. De este modo, una familia "tipo", compuesta por dos adultos y dos niños, necesitó en el segundo mes del año $1.057.923 para no ser considerada pobre, de acuerdo con la metodología oficial, mientras que para no caer en la indigencia requirió $468.108.
Los alimentos y sus cantidades se seleccionan en función de los hábitos de consumo de la población que surgen de la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENGHo) del propio INDEC. Para determinar la CBT se amplía la CBA mediante la aplicación de un coeficiente que contempla la relación entre los gastos alimentarios y los gastos totales observados en la población de referencia.







