



Con ventas en baja y una fuerte apuesta a las promociones, el sector juguetero decidió adelantar la celebración del Día del Niño al 10 de agosto, recuperando su fecha original tras más de una década.
La última vez que se festejó el segundo domingo de agosto fue en 2012: desde 2013, la jornada se movió al tercero para no chocar con las elecciones PASO.
La Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ) acordó regresar a la fecha tradicional con la expectativa de que eso mejore las ventas, que vienen cayendo fuerte: en mayo, el sector vendió un 15% menos que en 2024 y lleva dos años consecutivos con números negativos para esta fecha clave.
La estrategia apunta a acercar el evento a los primeros días del mes, cuando muchas familias ya cobraron el sueldo. Además, evita superponerse con feriados o fines de semana largos, momentos en que parte del presupuesto familiar se destina al turismo o a otras actividades. “Al tercer domingo la gente llega sin un mango”, resumieron desde la cámara.
El regreso a la fecha original también fue acompañado de acuerdos con bancos para alinear las promociones con tarjetas, cuotas sin interés y descuentos durante la primera semana de agosto. El objetivo: incentivar las compras anticipadas y evitar el amontonamiento de demanda sobre la fecha.







