



La investigación se inició a partir de la denuncia de un hombre que, tras percatarse de la falta de su billetera en el Aeropuerto Martín Miguel de Güemes, descubrió movimientos sospechosos en sus cuentas bancarias.
Según consta en la denuncia, la víctima se encontraba en el aeropuerto cuando notó que no tenía su billetera donde tenía sus documentos, dinero en efectivo, tarjetas de crédito y de otras billeteras virtuales.
Tras posponer su viaje y volver a casa, recibió notificaciones de compras realizadas con una de sus tarjetas de crédito. Esta situación lo llevó a realizar una búsqueda en los comercios donde se registraron los consumos.
Las pesquisas lo condujeron a dos locales comerciales donde las grabaciones de seguridad le permitieron identificar a los presuntos responsables de las compras fraudulentas.
Las imágenes mostraban a dos individuos utilizando la tarjeta sustraída. El denunciante manifestó conocer el domicilio de estas personas y solicitó la restitución de su documentación.
Deberá pagar $83 mil pesos por las compras realizadas con las tarjetas
La intervención policial permitió localizar a uno de los sospechosos, un hombre de 30 años que en un primer momento refirió tener la documentación en su domicilio. Al dirigirse al inmueble, la madre del acusado dijo que había encontrado una billetera pero que luego la quemó. Sin embargo, el hombre de 30 años señaló que había dejado la billetera en un ropero. Finalmente, encontraron la documentación de la víctima, que estaba parcialmente quemada.
Tras la etapa de investigación se llevó a cabo una audiencia flexible y multipropósito bajo la dirección del juez de Garantías 4 Diego Rodríguez Pipino. En esta instancia, se resolvió la situación procesal del hombre de 30 años al declararse procedente un acuerdo de juicio abreviado. Fue condenado como autor del delito de estafa y cumplirá un mes y diez días de prisión efectiva. Se dispuso su traslado a la Unidad Carcelaria 1 para el cumplimiento de la pena.
Además fue declarado reincidente por primera vez atento a sus antecedentes penales. Finalmente se estableció como fecha de cumplimiento de la pena el próximo 1 de abril.
A modo de reparación del daño causado a la víctima, el condenado deberá hacer efectivo el pago de 83 mil pesos. También deberá recibir tratamiento psiquiátrico o psicológico en su lugar de alojamiento.







