La "Ruta de la Muerte" se llevó un hijo y a su marido en 2 años

La viuda del conductor del remis que murió en la peor tragedia vial del año responsabilizó al alcohol y la desidia gubernamental. Fueron 5 muertos en total. La obra de la ruta sigue sin finalizar.

Accidente30/05/2016

"Hace 25 años que mi esposo Urbano Lizárraga manejaba el taxi. Antes trabajó en el ingenio El Tabacal. Ya le quedaba poco tiempo para jubilarse y, al igual que hace un año, el mismo trabajo se llevó esta vez a mi esposo mientras las obras de la autopista siguen durmiendo el sueño de los justos", dijo Inocencia Mara.

Ayer se realizaron en Orán los distintos sepelios de las cinco víctimas fatales que se cobró el brutal accidente de tránsito ocurrido en la mañana del sábado.

Sobre la tragedia, otro de los deudos, yerno del conductor del remise fallecido, dijo: "Sentimos un dolor tremendo por su muerte, pero más lamentamos que otra vez la negligencia y posiblemente el alcohol hayan tenido su participación en la tragedia".

Juan Rodolfo dijo ayer que "hasta donde sabemos, uno de los pasajeros que iba con mi suegro le dijo a mi señora que el otro auto se cruzó de carril. Venían tras una caravana. No le hicieron el dosaje de sangre, pero supuestamente los otros que venían en el auto estaban tomando.

En el Facebook vi foto de mi primo tomando con el otro conductor que murió. Así no se puede transitar por una ruta, que en apenas 50 kilómetros se llevó más vidas que otras que atraviesan el país de sur a norte".

Fuentes de la ciudad de Orán informaron ayer que el conductor del auto particular causante de la tragedia había estado en el novel municipio de Aguas Blancas en un cumpleaños y que ahí estuvieron tomando desde la noche anterior. El sábado a la mañana salió desde el pueblo fronterizo hacia Orán, donde nunca llegó.

La esposa del remisero fallecido, Inocencia Mara, dijo que dos años antes perdió a su hijo conduciendo un remise en la misma ruta desde Orán a Aguas Blancas. Aquella vez el auto de Lizárraga hijo chocó contra un taxi trucho, que cargaba un contrabando de mercancías desde Aguas Blancas.

"En ese accidente murió ese chico y una pasajera que llevaba", recordó Inocencia, quien en menos dos años perdió por la inseguridad vial en la ruta nacional 50 a su hijo y ahora a su esposo.

Sepelio

Ayer en la tarde fueron inhumados los restos mortales de las cinco víctimas fatales de la peor tragedia vial ocurrida durante el transcurso del año.
Urbano Lizárraga fue velado en su casa del barrio Caballito, Orán, ubicada en la esquina de la avenida YPF y la calle Sarmiento.

Durante esas honras fúnebres las conversaciones de colegas y vecinos giraron en torno del accidente y del mal estado de la ruta 50, convertida en cementerio de conductores. Otro tema fue la falta de control de alcoholemia, a tal punto que afirman que el conductor del auto particular, que salió de Aguas Blancas hacia Orán, atravesó en estado de ebriedad el control de Gendarmería. Recordaron el cuestionamiento que se hizo el año pasado cuando un colectivo y un remise chocaron provocando seis muertos (fue el 20 de septiembre). Aquel día, el remisero que venía de Aguas Blancas estaba ebrio y pasó el Puesto 28 sin que lo detuvieran.

Te puede interesar
Lo más visto

Recibí en tu mail los títulos de cada día