Futbolistas salteños quieren ser planta permanente de sus clubes

Al igual que los miembros de la Orquesta Sinfónica de Salta, que exigen su pase a planta permanente del Estado y dejar de revalidar sus aptitudes cada tres años, los futbolistas de los principales equipos de la provincia también quieren estabilidad laboral, ya que se consideran con probada calidad e idoneidad para permanecer en sus puestos, además de que les gusta Salta como ciudad para radicarse de manera definitiva.

Bueno, dejando de lado la ironía, porque el rendimiento de los jugadores de Albos y Santos es tan malo que cada uno debería irse solito a su casa, sino porque el deportista sabe que su continuidad está supeditada al rendimiento, estado físico, adaptación al grupo, gusto del técnico, estilo de juego y muchas otras variables. Ni a Maradona se le hubiera ocurrido solicitar al Nápoli en su mejor momento, estabilidad laboral, y dejar de rendir cuentas cada domingo ante el rival de turno.

Afortunadamente, este pedido de futbolistas salteños no es verdad. Lo que si es cierto es que los músicos de la Sinfónica solicitan que la Cámara de Diputados de la Provincia avance en una iniciativa para modificar una ley y que los convalide a conseguir la condición de pertenecer a la planta permanente del Estado. 

Esto que pasa en Salta con la Sinfónica, es cierto, se viene planteando en otras provincias, aunque no por ello deja de ser descabellado. Porque además implica comprometer recursos económicos de la Provincia, engrosa su estructura de RRHH, y compromete la calidad de este privilegiado cuerpo artístico. 

Desde la Sinfónica afirman que la estabilidad laboral es un derecho garantizado por la Constitución Nacional Argentina en el artículo 14 bis. “Tenemos probada idoneidad como instrumentistas e intérpretes al ingresar a través de un estricto concurso internacional abierto de oposición y antecedentes ante un jurado inobjetable. Cada tres años hacemos reválidas. Algunos integrantes aprobaron más de seis reválidas de sus cargos llevando casi dos décadas con contratos por tres años, por lo que pretendemos una modificación para lograr una estabilidad laboral. Muchos de los músicos vinieron desde fuera y con 20 años en la Sinfónica ya tienen una vida armada en Salta“, expresan en el comunicado.

Pero en las Orquestas de todo el mundo se concursan los cargos. Los músicos e intérpretes son evaluados ante jurados de especialistas y sólo permanecen en sus cargos mientras perdure su calidad. 

Los músicos consideran que la Orquesta Sinfónica forma parte del patrimonio cultural salteño y, por ello, debe valorarse y cuidarse, cosa que es cierto. Pero el patrimonio es "la Orquesta", no sus integrantes. No hay que confundirse.

Habrá que ver cómo avanza esta iniciativa en la Cámara de Diputados, y ojalá prevalezca la cordura y racionalidad en este tema.