A instancia de la Sede Fiscal Descentralizada de Tartagal, un hombre y una mujer fueron condenados a la pena de 6 años y 4 meses de prisión por el delito de transporte de estupefacientes agravado por el número de intervinientes. La condena, recaída sobre Nicolás Alejandro Moreno y Reyna Segovia Espinoza, fue impuesta por el Tribunal Oran Federal N°1 de Salta, integrado por Federico Díaz (presidente), Marta Liliana Snopek y Mario Marcelo Juárez Almaraz.
Tanto la calificación legal como las penas impuestas fueron requeridas por el fiscal federal Marcos Romero, quien llevó adelante la acusación durante el debate, fundó en numerosas pruebas la responsabilidad de las personas acusadas en calidad de coautores y rebatió planteos de nulidad alegados por la defensa.
En su alegato de apertura, el fiscal presentó el hecho y, posteriormente, a lo largo del juicio, logró ratificar los extremos de la acusación, tanto con las declaraciones de testigos como por la exposición de pruebas documental y peritajes producidos durante la investigación penal.
Al solicitar la declaración de responsabilidad de los acusados, Romero sostuvo que efectivamente quedó probado que Moreno y Segovia Espinoza fueron principales promotores del transporte de estupefacientes desbaratado por la Policía de Salta.
El fiscal reseñó que el caso tuvo inicio el 10 de agosto de 2019, poco antes del mediodía, cuando una persona reveló información sobre una maniobra relacionada con el tráfico de droga al personal de la División de Investigaciones Complejas contra la Narco Criminalidad de Orán.
El informante, prosiguió el fiscal, develó que un vehículo marca Renault, modelo Kangoo, que había salido de la localidad de Aguas Blancas y se dirigía a Orán, llevaba una importante carga de droga, y agregó que en el rodado circulaban ciudadanos de nacionalidad boliviana.
Con los datos aportados, entre ellos el número de la patente, la Policía efectuó la búsqueda del vehículo, el cual fue localizado en Orán. “El rodado fue ubicado en inmediaciones del barrio Libertad. Los policías le dieron la voz de alto, pero el conductor no se detuvo e intentó darse a la fuga. Sin embargo, fue rápidamente interceptado”, relató el fiscal.
Producto de la requisa, el personal policial halló 27 paquetes de droga en el baúl del utilitario, envueltos en una lona del tipo de las que son utilizadas usualmente por “bagayeros” en esa zona de frontera. Tras las pruebas de campo, se determinó que el estupefaciente era marihuana y que tenía un peso de 25 kilos.
Junto a Moreno y Segovia Espinoza, los policías detuvieron también a Juanito Vargas Guzmán y Luis Tirano Martínez, a quienes les fue otorgada la excarcelación por el juez federal de Garantías de Tartagal Carlos Martínez Frugoni, a cargo de la audiencia de formalización del caso.
Pese a los compromisos asumidos ante el juez de colaborar con la justicia, ambos acusados no volvieron a presentarse en las audiencias posteriores, por lo que, a solicitud de la fiscalía, se solicitó la declaración de rebeldía y, una vez resuelto en ese sentido, se libró la orden de captura correspondiente.
En su exposición en el juicio, el fiscal demostró la calidad de coautores de Moreno y Segovia Espinoza. Ratificó que la operación de tráfico desbaratada fue preparada por los dos acusados días antes, pues de los teléfonos secuestrados en su poder surgieron cruces de mensajes y llamadas que así lo corroboraban.
Al mencionar los roles, Romero afirmó que Segovia Espinoza organizó el transporte de la droga, mientras que Vargas Guzmán y Martínez eran “paseros” y habían llevado la marihuana desde Bolivia por distintos pasos hasta Aguas Blancas. Moreno, en tanto, era el encargado del traslado.