De acuerdo a la información a la que pudo acceder El Tribuno, la Fiscalía ordenó que los restos de la bebé sean trasladados al Cuerpo de Investigación Fiscal (CIF), en Salta capital, para ser sometidos a una autopsia.
El estudio busca determinar en qué condiciones la criatura fue expulsada del útero de la madre y dar certezas de los procedimientos en ese momento.
El pedido del fiscal también intenta aclarar versiones que fueron surgiendo mientras se conocían más detalles del escabroso caso. Es que mientras Santiago Payo, director del hospital de Tartagal, aseguró a algunos medios que la nena había sido expulsada sin vida, la madre aseguró lo contrario.
En tanto que otras versiones del entorno médico afirmaron que la criatura "lloraba y tenía autonomía vital" y que fue asfixiada y luego arrojada en una bolsa de desechos.
Por otro lado, el abogado Ramber Ríos, representante legal de la joven oriunda de Salvador Mazza a quien hace dos semanas atrás se le practicó el aborto, denunció a dos funcionarios del Ministerio Público Fiscal por mal desempeño, retardo de justicia y falta a los deberes de funcionario público.
La denuncia recayó contra el fiscal de Graves Atentados contra las Personas (GAP) Gonzalo Ariel Vega y la fiscal de Violencia Familiar y de Género, Lorena Martínez.
Fue el propio letrado quien dio detalles de la denuncia que comprende también un pedido de jury para ambos fiscales al considerar que "el retraso de justicia en el que incurrieron no es un tema menor, sino que significó la muerte de una beba, a quien la madre, convencida por sus familiares de que desistiera del aborto, igual fue sometida a esta práctica en el hospital de Tartagal", precisó.