Vilma, junto a otros 15 estudiantes de medicina de la Universidad Nacional de Salta, hoy se egresaron, convirtiéndose en los primeros graduadas de la carrera en la provincia. En el Anfitreatro G400, recibieron su ansiado título.
InformateSalta participó del emotivo acto y pudo hablar con algunos de los egresados. Vilma, completamente emocionada contó: “Es un orgullo para mí, es un sueño cumplido, que nació desde niña, y que por diferentes circunstancias de la vida no se pudo concretar en tiempo y forma, pero nunca es tarde, esta fue una muestra para mí misma, gracias a la universidad pública”.
Abrazó con tanta fuerza esta posibilidad que encontró tiempo entre el trabajo y la familia para recibirse de médica. “Fue un largo camino, con muchos obstáculos personales, familiares, laborales, pero pude superarlos y alcanzar este objetivo. Gracias a mis jefes y a mi familia por el apoyo”.
Ataulfo, otro de los egresados se mostró sonriente y feliz. “Esto es una gran satisfacción, es un sueño, pero no solo nuestro, sino el de muchísimas personas, aquí hay profesores, dirigentes, que soñaron con médicos salteños y una carrera que sea salteña”.
Reconoció que este título es el inicio porque le “la formación del médico es muy extensa, ahora toca especializarnos”.
Aprovechó los micrófonos de InformateSalta para enviarles un mensaje a los jóvenes, “a los que quieran hacer esta carrera háganla, requiere su esfuerzo y dedicación, pero es hermosa y cualquiera la puede hacer”.
Pablo, también recibió hoy su título, ingresó a la universidad en 2015 y a pesar del confinamiento por la pandemia y lo que significó nunca bajó los brazos y siguió hasta el final. “Feliz capaz es poco, pero lo es todo, no sólo por el camino sino porque disfruté cada segundo de la carrera”, dijo.
Los años de carrera no “fueron para nada fáciles, pero sí muy felices. Nos tocó salir a la calle cuando el gobierno de Macri nos cortó el presupuesto, pero nuestra lucha era en las aulas, sentarse a estudiar y ser impecables y hoy nos recibimos 16, no dudo de ninguno, de su calidad humana y técnica”.
“Nadie se salva solo y hay un esfuerzo colectivo para que hoy estemos acá. Hay que disfrutar los procesos y valorarlos, hoy estoy feliz”, aseguró.
Finalmente Daniel Hoyos se mostró muy emocionado, “Esto es un comienzo, significa que mucho en la provincia puede cambiar, poder tener médicos formados de este lugar, de toda la provincia, es una apuesta importante y a largo plazo. Hemos conseguido que se reciban los primeros, y pronto habrá muchos más”.