La denuncia la radicó una mujer que tiene a cargo el cuidado de dos menores. Explicó que las niñas le contaron que su padrastro, R. M. J., las manoseaba y las ofrecía a sus amigos para que abusen de ellas mientras las amenazaba con no darles de comer si contaban lo que sucedía.
Durante la audiencia en Cámara Gesell que se realizó a una de las menores en junio del año pasado, relató que J. la vendía a A. A. para que él abuse de ella, y dijo que eso sucedía en el lugar de trabajo de éste desde que tenía 14 años. Su hermana, en tanto, contó que su mamá, pareja de J., tenía conocimiento de lo que les sucedía.
La defensa de A. A. presentó un pedido de revisión de la prisión preventiva, por lo que la Oficina de Gestión Judicial (OfiJu) de Metán fijó una audiencia flexible y multipropósito en el marco del plan piloto de oralidad. Durante la misma el juez de Garantías de ese distrito Mario Teseyra escuchó a las partes y rechazó el planteo de la defensa, por lo que ordenó que el hombre continúe con prisión domiciliaria.
A. M. A. está acusado del delito de abuso sexual con acceso carnal (hechos reiterados). Por su parte, R. M. J. fue imputado como autor de los delitos de amenazas (dos hechos), desobediencia judicial (tres hechos) y abuso sexual simple agravado por la guarda y la convivencia. Finalmente, la madre de las niñas está acusada por el delito de encubrimiento agravado de abuso sexual simple agravado por la guarda y la convivencia.
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