El hecho investigado ocurrió en una clínica privada de Tartagal, cuando un paciente ingresó con un fuerte dolor de estómago y tras realizarle una radiografía y una ecografía, el profesional efectuó un diagnóstico de apendicitis y le practicó una cirugía, tras la cual el paciente falleció por shock séptico.
Luego del fallecimiento del paciente, los familiares realizaron una denuncia y desde la Fiscalía se dispuso el cumplimiento de numerosas medidas tendientes al esclarecimiento del hecho, entre ellas, análisis de la historia clínica, estudios anatomopatológicos y otros.
El objetivo es analizar si el profesional le habría brindado al paciente un tratamiento inadecuado que derivó en su muerte por un shock séptico por negligencia médica.
En vista de ello, el fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados de Tartagal, Gonzalo Vega, imputó en forma provisional al médico de 60 años como autor del delito de homicidio culposo. El acusado estuvo acompañado de un defensor oficial y tras conocer la imputación en su contra, se abstuvo de declarar.