El hecho sucedió en una finca donde trabajaba la madre de la víctima de tan solo cinco años. El hombre tenía 71 años y era compañero de trabajo, se desempeñaba como casero.
Una mujer relató que su hija de cinco años le contó que su “tío” la había tocado en sus partes íntimas varias veces, el hombre había generado una relación de familiaridad por lo que le decían tío.
La niña contó que cuando ella se iba a “pastorear” los animales, el acusado se le acercaba y le tocaba. La menor manifestó que no había contado antes lo sucedido porque el acusado le decía que solo eran “caricias”.
Tras conocer estas situaciones, la madre denunció al hombre de 71 años y fue condenador a la pena de un año y seis meses de prisión condicional.
Para conservar la prisión en suspenso, el sujeto deberá cumplir durante dos años las obligaciones impuestas por el juez Federico Diez. Entre ellas, abstenerse de acercarse y de contactarse con la víctima y sus familiares y someterse a tratamiento psicológico previo diagnóstico que acredite su necesidad.
Te puede interesar
Lo más visto
