Declaró Cristina Kirchner, a través de un escrito, en la causa de los cuadernos de coimas
La ex Presidente paso por los tribunales de Retiro y presentó un escrito para responder ocho acusaciones.
Nacional25/02/2019Sin militantes, pero un apoyo especial. Ese fue el marco que tuvo la ex presidenta Cristina Kirchner durante su paso por los tribunales federales de Comodoro Py para declarar en ocho expedientes derivados de la causa de los cuadernos de la corrupción, en donde se defendió con un escrito común, indicó Infobae.
Como en otras oportunidades en las cuales debió dar explicaciones en la Justicia, la ex mandataria tuvo el respaldo y acompañamiento del ex embajador en la Santa Sede, Eduardo Valdés y, desde el Vaticano, recibió un "afectuoso saludo" por parte del líder de la CTEP, Juan Grabois, dos personas cercanas al Papa Francisco.
"Otra vez CFK enfrenta una jauría de hienas judiciales en su madriguera. Desde donde estoy, mi apoyo para una gran mujer y mi repudio a los doctorcitos de la ley", señaló el referente social a través de las redes.
Valdés es un histórico del peronismo porteño que se desempeñó como embajador argentino en el Vaticano entre 2014 y 2015, y fue el coordinador de los encuentros que Cristina Kirchner mantuvo con Francisco en la Santa Sede cuando era presidenta.
Grabois, en tanto, es líder de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), uno de los referentes de las organizaciones sociales más críticas con el Gobierno (aunque en más de una oportunidad de manera abierta elogió a la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley), y llegó a trabajar como consultor del Pontificio Consejo de Justicia y Paz del Vaticano.
Tanto Grabois como Valdés conocen al Sumo Pontífice desde que era Arzobispo de la ciudad de Buenos Aires y compartían las misas por las víctimas de la trata y la exclusión.
Por otro lado, en el escrito presentado ante el juez Claudio Bonadio, Cristina Kirchner arremetió contra el magistrado y el fiscal Carlos Stornelli, atacó a periodistas y dijo que es víctima de una persecución política impulsada por el gobierno nacional.
Más allá de Valdés, Cristina Kirchner no estuvo acompañada por la militancia y se retiró de los tribunales federales pasadas las 10.30. De vestido blanco y vivos negros, pantalón y zapatos, se movilizó en un Toyota Corolla gris plata, saludó a los empleados judiciales (incluso se fotografió con uno de ellos, de nombre Ricardo Albornoz), a los periodistas que la esperaban en uno de los ingresos laterales del edificio judicial de Retiro e ingresó rumbo al cuarto piso donde presentó el escrito en el juzgado de Claudio Bonadio.