Amenazó con un cuchillo a su tía, abusó de ella y pasará 10 años tras las rejas
El joven de 29 años, sobrino del esposo de la víctima, la sometió sexualmente después de una ingesta alcohólica. La mujer intentó escapar y gritaba pidiendo ayuda pero nadie logró escucharla.
Justicia12/09/2019La jueza María Victoria Montoya Quiroga, vocal de la Sala II del Tribunal de Juicio, condenó a un joven de 29 años a la pena de diez años de prisión efectiva por resultar autor penalmente responsable del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de arma, en perjuicio de su tía.
La magistrada revocó la condicionalidad de una pena anterior impuesta contra por la Sala I y unificó ambas condenas en la pena única de diez años y ocho meses de prisión efectiva. Ordenó el inmediato traslado del condenado a la cárcel penitenciaria local.
Finalmente dispuso la extracción de material genético del condenado por parte del Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), previa asignación del Dato único de Identificación Genética (DUIG), para su incorporación en el Banco de Datos Genéticos.
El hombre fue denunciado por su tía, por un hecho ocurrido el 15 de agosto de 2018 en una vivienda de barrio El Huaico, de la ciudad de Salta. La mujer relató que el imputado es sobrino de su esposo y que ese día ambos se amanecieron ingiriendo bebidas alcohólicas. Luego su marido se fue a dormir y el imputado se quedó escuchando música a todo volumen.
Cuando ella se levantó se vistió para salir a hacer unas compras y, de repente, sin motivo alguno, el joven se puso agresivo y amenazándola con un cuchillo la golpeó y la sometió sexualmente. La mujer refirió que por momentos el acusado desvariaba y le decía que lo perdone pero luego volvía a agredirla y a amenazarla. La damnificada manifestó que en todo momento intentó liberarse y gritaba pidiendo ayuda, pero su esposo dormía y la música fuerte impedía que la escucharan desde afuera.
La víctima refirió que la agresión duró como una hora, hasta que su marido finalmente despertó. Al verla toda golpeada, se enfrentó con el imputado y ella logró huir.