Exclusivo: el asesino de Palomo habría anunciado que iba a robar una “chata”
Varios chats y audios en las redes sociales comprometerían al menor de 15 años, como así también a los otros dos de 17. Buscan establecer si los mayores detenidos están o no implicados.
Justicia30/09/2019La investigación por el homicidio de Sandra Palomo estaba bajo secreto de sumario, pasados los 10 días establecidos, no se informó si la medida fue extendida, sin embargo la situación del adolescente de 15 años detenido por el asesinato de Sandra Palomo, la docente de 53 años, quien fue hallada muerta detrás del Vivero Municipal el 1 de septiembre, se torna cada vez más comprometida, pues las pruebas empezarían a descartar la idea de que hubo mayores por detrás de este horrible homicidio.
En la documentación del caso, a la que pudo acceder InformateSalta, se puede advertir que el crimen de Palomo habría sido perpetrado por el menor de 15 años, quien habría sometido a su víctimas a graves lesiones, tanto heridas de arma blanca y golpes que llevaron a la docente a la muerte.
Al respecto, la misma fiscal, María Luján Sodero, en el decreto de imputación abierto en contra del adolescente, resaltó aspectos en torno a la forma en que murió la docente. Puntualizó que el menor le asestó varias puñaladas a la altura del cuello y “múltiples golpes en el rostro provocándole heridas, hematomas, escoriaciones y fractura de nariz, lo que produjo el desangramiento hasta la muerte”. Debido a estas lesiones, la fiscal sostuvo que “la víctima sufrió una larga agonía”, algo que también fue enfatizado por el abogado de la familia Palomo.
La mujer salió de su casa el sábado 31 de agosto, a las 12.30 a comprar comestibles para el bautismo de su nieto y no regresó, poco antes de las 14, una hora y media después de salir de su casa, fue atacada en el subsuelo de un supermercado de barrio Tres Cerritos. Veinte horas más tarde, Mariana Quipildor, una vecina del barrio Solís Pizarro, en la zona oeste de la ciudad, alertó al 911 sobre el hallazgo del cadáver de una mujer, el que resultó ser el de Palomo.
Contundente
Al ser detenido por el crimen, el menor de 15 años, quien residía a dos calles de la vivienda de la docente, reconoció el crimen de manera informal ante un policía que lo trasladó junto a su madre desde su casa a las oficinas de la División de Homicidio.
En su confesión, la que luego no quiso dar de manera oficial ante la fiscal, el menor habría dicho que mató a Palomo porque estaba muy enojado, pero no con la víctima sino con su madre, con quien tenía muchos “quilombos”, aunque no habría expresado cuáles.
Tras supuestamente erelatar fríamente como la mató habría dicho que no podía decir más nada, pues en el hecho habrían participado cuatro sujetos mayores, los que iban a matarlo si hablaba, excusa que habría utilizado para llamarse al silencio, del que hasta el momento no salió. Pese a ello, comenzaron a aparecer evidencias de que el adolescente, en realidad, habría anunciado con anterioridad y a su grupo de amigos que habría estado dispuesto a robar una camioneta.