En la misa estacional del primer día del Triduo del Milagro 2022, monseñor Mario Cargnello instó a los salteños a reflexionar en torno al misterio de la fe, haciendo un especial llamado a ser buenos creyentes y a imitar a la Virgen teniéndola como “nuestra señora, vida, dulzura y esperanza”.
“Damos gracias a Dios porque este año podemos celebrar en un clima de fiesta y estando reunidos”, destacó primeramente al comenzar su homilía donde agregó que “la experiencia de la pandemia pone en el corazón la necesidad de vivir la vida en el camino, en los peregrinos percibimos esa experiencia que se alimenta en el caminar juntos hacia una meta, no sin sentido”.
En este punto recalcó en seguir el ejemplo de la Virgen del Milagro. “Su historia se hace camino con el pueblo de Salta en su devoción, que las mujeres y hombres prolongan hasta hoy; cuando empezó la pandemia nos preguntábamos, manoteando ideologías, ¿qué va a pasar con la fe del pueblo? Ustedes nos muestran que la fe no ha muerto”, aseguró el arzobispo.
Aquí aseguró que como Iglesia se ve la necesidad de seguir acompañando y alimentando la fe del pueblo que sigue creyendo en los santos patronos tutelares, creencia que se vuelve esperanza para los fieles. “No es imponer una cristiandad, esto es de corazón a corazón, respetar la fe del pueblo”, subrayó monseñor.
Por último dijo que, en su día, la Virgen del Milagro le pide a los salteños “un gesto de grandeza de reconocerla como nuestra señora, madre de Salta, vida, dulzura y esperanza nuestra”, concluyó en medio de los aplausos que cerraron sus palabras.
“Nuestra historia está atravesada por María del Milagro, desde los terremotos, el pacto de fidelidad y la experiencia de los peregrinos, ella está ahí”
Lo más visto
