El club del Chaco que recibirá una fortuna por el pase del Diablito Echeverri al City

En medio del debate por el ingreso de las Sociedades Anónimas Deportivas al país, los clubes de barrios siguen estando a la altura y demostrando su importancia. Por cada crack que la rompe en nuestro país, detrás hay una institución que le dio contención desde sus inicios. El caso de Claudio “Diablito” Echeverri no es la excepción.

El anuncio de que no renovaría su contrato con River y su próxima venta al Manchester City tienen en vilo a los hinchas del Millonario, pero también a todos los socios y trabajadores de Deportivo Luján de Chaco, club que lo formó y en el que dio sus primeros pasos en el futbol, y que ahora recibirá alrededor de un millón de euros por esta transferencia.

TN se comunicó con Emiliano Chiaramonte, presidente de la institución de Resistencia, para conocer más y saber cómo afectará a la entidad el ingreso de esta suma colosal. “Es un montón, nos cambia todo, nos acelera los tiempos de lo que tenemos proyectado”, aseguró con mucha ilusión.

Cómo nació Deportivo Luján

En cada rincón de la Argentina, hay un potrero. En estos lugares brotan los sueños de cientos de chicos que se divierten y juegan el deporte que más los apasiona. Algunos de ellos, aunque sean los menos, pueden lograr el anhelo de vivir del fútbol.

Sin embargo, sin una organización y un club que los ayude, los contenga, los cobije, nada es posible. Es por eso que surgió Deportivo Luján. “El 8 de enero vamos a cumplir 16 años. Estamos en el barrio Villa Río Negro, que es uno de los más populosos y más viejos de Resistencia en Zona Norte”, le contó Chiaramonte a TN.

El motor de la creación del club fue justamente el hecho de hacer colectivo este juego y esta diversión: “Surgió con la necesidad de ser un club de contención para la barriada, para empezar a darle a todos los potreros que había en la zona un lugar donde los chicos pudieran entrenar, jugar”.

Esto convirtió a Deportivo Luján en una de las instituciones más importantes del barrio “junto al centro de salud y las escuelas”.

El club como motor del barrio

La tarea de Emiliano Chiaramonte en Deportivo Luján fue darle un salto más a la organización del club. Sin embargo, no fue fácil plasmar su idea desde el inicio por un tema que no estaba en los planes de nadie: asumió el cargo de presidente dos semanas antes de la explosión del COVID-19.

“Yo empecé con mi gestión en el 2020 antes de la pandemia, justo 15 días antes, así que estuvimos parados, fue difícil”, recordó. Emiliano fue parte del primer equipo del club entre el 2011 y 2016, y ese sentido de pertenencia fue el que lo empujó para no aflojar.

Tal como lo indica su nombre, Deportivo Luján es más que un club de fútbol: “Aparte del fútbol en todas sus categorías contamos con fútbol femenino de Primera División, Handball y Hockey femenino formativo”.

La vida social de la institución también es importante: “Contamos con 114 socios, pero aparte tenemos la cuota deportiva, que es la que nos permite mantener la competición de las distintas ligas. Estos son chicos o familias que vienen durante el año para la competición, pero no son socios directos del club porque en el club todavía no tenemos condiciones edilicias para brindar un servicio o algo más allá de los deportes”.

De esta manera, la vida diaria de Deportivo Luján se sostiene en gran medida por “el que colabora, aporta en el barrio y muchos comercios también”.

El profesionalismo al servicio de los chicos y chicas

A pesar de las dificultades de infraestructura, en los últimos años, el club de Resistencia dio un salto de calidad muy importante con profesionales al servicio de los chicos y las chicas.

“En los últimos dos años nos dedicamos a armar una coordinadora deportiva integral a la cual incorporamos una psicóloga y una trabajadora social. Nos faltó incorporar una nutricionista. Creemos que el crecimiento integral de los pibes es fundamental para que lleguen en buenas condiciones a competencias más profesionales. En ese sentido, trabajamos con esa idea de contención en una primera instancia, pero incorporándole toda la cuestión deportiva necesaria para poder ir desarrollando el trabajo de los pibes”. Y agregó: “Somos el único club en la ciudad que lo incorporó”.

Cómo es el Deportivo Luján

“Tenemos un predio desde el 2013 de tres hectáreas que se fue armando de muy de a poco. Yo cuando jugaba teníamos la cancha de fútbol 11, un vestuario de madera y un bañito, nada más”, relat´Chiaramonete.

Y, destacó: “Hoy por suerte eso lo pudimos hacer crecer: tenemos un playón deportivo y una sede que sirve como vestuario. Hace un par de años que estamos haciendo el estadio propio y tenemos también un espacio más reducido donde los más chiquitos hacen las competencias de fútbol”.

A través de distintos programas nacionales o provinciales, Deportivo Luján accedió a los fondos para hacer el cerramiento parcial de su predio (aún le falta completar la mitad) y las iluminaciones, que se fueron mejorando pero aún son bastante precarias.

“Hoy tenemos más de 300 pibes, casi 400, haciendo actividades. La verdad que muchas veces nos quedamos cortos para poder atender a tanta cantidad, pero seguimos haciendo esta gestión y tenemos proyectos para poder crecer y brindar mejor calidad en términos de infraestructura”, recalcó el presidente.

Actualmente, la Comisión Directiva de la institución está conformada por siete personas. Tiene, además, un equipo de profesores y coordinadores deportivos. Entre administración, mantenimiento, cancheros y utileros, cuenta con más de 30 personas trabajando.

El Diablito Echeverri: la gran joyita de Deportivo Luján

El nombre de Claudio Echeverri está en la escena del fútbol argentino desde hace muchísimo tiempo. El juvenil deslumbró desde su irrupción en las inferiores de River, pero en Deportivo Luján lo conocen desde chico y ya sabías que iba a llegar lejos.

“Con nueve años ya se hablaba en el club de Echeverri. Todos hacíamos fila para ver un entrenamiento, porque la verdad que con esa edad ya se notaba algo distinto. Se notaba otra forma de hacer las cosas y no solamente en el talento nato, sino también en lo rápido que iba aprendiendo”, recordó Emiliano.

Con la realidad que lo tiene como protagonista de uno de las ventas más importantes del fútbol argentino de los últimos años, el Diablito se convirtió en un modelo de referencia para los chicos de Deportivo Luján: “Hoy les podemos decir a los pibes que cualquiera puede cumplir su sueño. No solamente está el talento, que es algo que obviamente genera una diferencia, pero con todo este trabajo que intentamos incorporarle a los chicos ese desarrollo es posible”.

La venta del Diablito Echeverri puede cambiar la realidad de Deportivo Luján

Los números que se manejan alrededor de la venta del Diablito Echeverri todavía no están claros. Sin embargo, para Deportivo Luján es una cifra que puede cambiarle su realidad completamente.

El convenio firmado establece que, de una futura venta, el club chaqueño se quedaría con un 15% (con un tope máximo de un millón de dólares). Si bien esta cifra terminará siendo menor por un tema de impuestos, no deja de ser un ingreso enorme para la institución.

 “Para nosotros es un montón, nos cambia, nos acelera los tiempos de lo que tenemos proyectado, que es el cerramiento del predio, el mejoramiento de vestuarios, de los campos de juego, terminar nuestra cancha y contar con mayores elementos deportivos que durante el año se consumen rápidamente”, contó Emiliano con el entusiasmo que se repite en cada integrante de Deportivo Luján.

El objetivo es uno solo: seguir creciendo. “Esto nos va a acelerar los tiempos. Los fondos de nuestra gestión generalmente vienen de programas nacionales o provinciales que dependen del gobierno de turno y del momento. Ahora con lo principal que tenemos que hacer es avanzar con la infraestructura”.

“La única manera de crecer es teniendo estos espacios que funcionen de manera colaborativa, coordinada. De tener un equipo de Coordinación Deportiva que le pueda incorporar todos los elementos con respecto a la situación de los pibes que es fundamental para el desarrollo, para el crecimiento. Eso es central. Pero sobre todo decirles a los pibes que esto es diversión, que es la posibilidad de cumplir un sueño efectivamente, pero no solo deportivo, sino de poder crecer de la mejor manera en términos integrales”, afirmó Emiliano.