El Gobierno cerró el mes de marzo con una caída de reservas brutas de más de USD 1.115 millones pero aún así consiguió juntar los dólares suficientes para cumplir con el primer objetivo trimestral de acopio de divisas en el Banco Central comprometido con el Fondo Monetario Internacional.
La última actualización al programa con el FMI, que quedó establecido a mediados de marzo, le puso al Banco Central nuevas pautas de acumulación de reservas en el camino hasta septiembre de este año, que es cuando termina, en los papeles, el Extended Fund Facility (EFF) que comenzó en marzo de 2022.
Como lo hace con el escenario fiscal, de deuda flotante y de otras variables, para el caso de las reservas también establece metas anuales e intermedias. Más allá de la meta anual, que implica la acumulación de USD 10.000 millones en el primer año de gobierno de Javier Milei, hay objetivos trimestrales que contemplan cuál es la dinámica cambiaria estacional que tiene cada año.
Más allá de la meta anual, que implica la acumulación de USD 10.000 millones en el primer año de gobierno de Javier Milei, hay objetivos trimestrales que contemplan cuál es la dinámica cambiaria estacional
El segundo trimestre del año es el ejemplo más claro en ese sentido. El tramo entre abril y junio coincide con la liquidación de la cosecha gruesa de la soja. Por tanto, esa lapso del 2024 es el pico de acumulación de dólares en el BCRA -USD 9.200 millones más que en diciembre pasado- que establece el programa con el Fondo, y le da al Poder Ejecutivo un margen para incluso perder unos USD 1.800 millones de reservas entre julio y septiembre, en los meses de habitual menor ingreso de divisas por el comercio exterior.
En la letra chica comprometida ante el Fondo Monetario, el primer mojón que debe cumplir el Banco Centra es el que tiene como fecha de corte el 31 de marzo. Por el feriado largo, el último día hábil que se toma en consideración para hacer la cuenta de acumulación conseguida fue ayer miércoles.
El primer deadline del año marca que a fines de marzo el Banco Central debería haber acumulado unos USD 6.000 millones en comparación con el nivel de divisas que tenían sus arcas cuando Milei asumió el mando de la Casa Rosada. Las metas trimestrales de acumulación de reservas incluyen en la cuenta los desembolsos que el Fondo Monetario habilite a lo largo del año para el gobierno a medida que cumpla las metas.
Estimaciones privadas marcan que el BCRA, que preside Santiago Bausili, habría conseguido llegar al fin del trimestre con un acopio de divisas bien por encima de lo comprometido ante el FMI. Para la consultora LCG, la diferencia a favor sería cercana a los USD 2.200 millones, ya que estimaron que desde el 10 de diciembre la acumulación rondó los USD 8.200 millones. Hay un asterisco que suele medir LCG que es un “descuento” de reservas la colocación de Bopreal, el bono en dólares del BCRA para dar curso a pagos de deuda importadora.
Para la consultora LCG, la diferencia a favor sería cercana a los USD 2.200 millones, ya que estimaron que desde el 10 de diciembre la acumulación rondó los USD 8.200 millones. El economista Amílcar Collante, por su lado, calculó que el margen a favor estaría más cerca de los USD 3.000 millones
Con ese elemento en la ecuación, el acopio de divisas fue de USD 5.400 millones. El economista Amílcar Collante, por su lado, calculó que el margen a favor con el que terminó el trimestre estaría más cerca de los USD 3.000 millones.
Más allá de la utilidad de esa cifra neteada para poder analizar el nivel “real” de sumatoria de reservas, la metodología del FMI no hace ese tipo de distinciones, ni tampoco descuenta los propios desembolsos realizados por el organismo, y con los que luego el Poder Ejecutivo le repaga el préstamo a Washington. Solo habilita un margen de maniobra sobre el umbral mínimo de acumulación por un total anual de USD 750 millones ante faltantes o sobrantes de desembolsos desde organismos multilaterales de crédito.
El BCRA llegó con comodidad al cierre del primer trimestre incluso a pesar de la caída de USD 1.115 millones en las reservas brutas en los tres días hábiles de la semana. En esa cuenta influyeron el pago a bonistas tenedores de Cupón PBI con un fallo judicial a favor en la corte de Londres, por USD 337 millones, que fue vehiculizado a través de un fondo fiduciario para el que el Gobierno contrató a dos bancos internacionales y que en rigor impactó en la cuenta de reservas el martes, y pagos por USD 272 millones a organismos internacionales (principalmente el BID y el BIRF) y un pago de USD 182 millones para cumplir con la cuota semestral con el Club de París.