Créditos de foto: Javier Rueda
De la ilusión a la desilusión, el equipo de Esteban Espeche quedó fuera de la lucha por el ascenso directo y deberá someterse a los largos y costosos viajes de la reválida.
El Santo perdió frente Unión Sunchales y dejó escapar la posibilidad de meterse en la segunda fase del torneo y tendrá que recorrer más de 8800 kilómetros para enfrentar a sus rivales, cuando todavía restar jugar la última fecha de la etapa clasificatoria.
Un partido más tendrá que jugar el equipo del “Buitre”, será ante Sol de América y aunque el resultado no altere la tabla, será para cumplir con el fixture.
La zona reválida que integra Juventud está conformada por Crucero del Norte, Unión Súnchales, Sarmiento (Resistencia), Boca Unidos (Corrientes), El Linqueño, Independiente de Chivilcoy, Douglas Haig de Pergamino, Defensores de Pronunciamiento y Gimnasia de Concepción del Uruguay.
Ayer el plantel retornó a los entrenamientos pensando en el partido ante los formoseños.
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