La noticia de que los miembros del Senado de la Nación pasarían a cobrar dietas de $9 millones provocó críticas de distintos orígenes y la reacción de la propia Cámara alta del Congreso, que por unanimidad canceló el último aumento de sus haberes.
El aumento se había dado a conocer esta semana después del acuerdo paritario de los empleados del Senado que incluye a los legisladores.
Por otro lado, José Mayans de Unión por la Patria, introdujo un proyecto para establecer una escala salarial de todos los funcionarios públicos, que por aprobación unánime se discutirá en comisiones.
El proyecto dispone un tope máximo de los salarios de las autoridades de los tres poderes del Estado, organismos descentralizados y empresas públicas, en donde el Presidente y la Vicepresidenta quedarían en mayor escala de haberes pero no podrán superar los veinte (20) Salarios Mínimos, Vitales y Móviles, en agosto del 2024 anclado en los $262.432.
Asimismo, apunta fijar un principio de “coherencia y uniformidad” en la que los ministros, secretarios, subsecretarios y cargos equivalentes del Poder Ejecutivo Nacional; los magistrados y funcionarios del Poder Judicial de la Nación, del Ministerio Público de la Defensa, del Ministerio Público Fiscal y del Poder Legislativo, no pueden superar los quince (15) Salarios Mínimos, Vitales y Móviles.