Estas son las cinco empresas que buscan privatizar para cumplir con el compromiso con el FMI

El segundo semestre del año trae consigo una doble exigencia para el Gobierno nacional: por un lado, el frente fiscal y cambiario cada vez más ajustado; por el otro, la necesidad de mostrar avances concretos en las promesas de campaña. En ese contexto, la Casa Rosada apura los procesos para iniciar la privatización de empresas estatales, una de las banderas centrales de la gestión de Javier Milei.

A partir de la aprobación de la Ley Bases, ocho compañías estatales quedaron habilitadas para ser privatizadas total o parcialmente. Ahora, según confirmaron fuentes oficiales, la Agencia de Transformación de Empresas Públicas -que encabeza Diego Chaher- trabaja para lanzar cinco procesos de licitación antes de que finalice el año.

Las firmas más avanzadas en ese camino son Intercargo, Corredores Viales, Enarsa, Aysa y las centrales hidroeléctricas del Comahue. Aunque cada proceso tiene su propio esquema, la expectativa oficial es que las adjudicaciones se concreten durante 2026.

Intercargo

Dedicada a los servicios de rampa en aeropuertos, Intercargo mostró superávit financiero en el primer trimestre, pero perdió terreno tras la apertura del mercado dispuesta en noviembre pasado. En marzo, se autorizó su privatización total. El Gobierno prevé lanzar la licitación cerca de fin de año.

Corredores Viales

Administra 6000 km de rutas nacionales y también mostró superávit. En junio se licitó un primer tramo de la "ruta del Mercosur", y la apertura de sobres, inicialmente prevista para agosto, fue postergada al 8 de septiembre. La estrategia oficial contempla concesionar por tramos a operadores privados.

Enarsa

La energética estatal, que registra un fuerte déficit ($34.897 millones en el primer trimestre), también fue habilitada para privatización. El Gobierno proyecta vender el 50% de Citelec, accionista controlante de Transener, a través de un concurso nacional e internacional.

Aysa

Con más de 6200 empleados, Aysa también avanza hacia un esquema mixto: 51% de sus acciones será adjudicado a un operador vía licitación, 39% se colocará en la Bolsa y el 10% quedará en manos de sus trabajadores. El anuncio del proceso se espera para fin de año, con adjudicación en 2026.

Centrales hidroeléctricas del Comahue

Las represas de Alicurá, El Chocón, Cerros Colorados y Piedra del Águila, claves para el sistema energético nacional, operan con concesiones prorrogadas desde 2023. El plan oficial es lanzar una nueva licitación antes de fin de año, con contratos a 30 años.

Este avance se enmarca en los compromisos asumidos por el Gobierno ante el Fondo Monetario Internacional (FMI), que espera recibir en noviembre una hoja de ruta detallada sobre el proceso de privatización. El último acuerdo con el organismo, por US$20.000 millones, incluyó este punto como una de las reformas estructurales del programa.

En Balcarce 50 admiten que no se trata de un camino sencillo. Aún así, la apuesta es avanzar con las licitaciones para cumplir con los compromisos internacionales, oxigenar las cuentas públicas y enviar una señal de confianza al mercado. El objetivo de fondo: empezar a resolver la histórica escasez de divisas que condiciona la economía argentina.