En la jornada de ayer en Tartagal, se pudo divisar un ataúd saliendo de la Comisaría 42, el cual fue trasladado en uno de los móviles para darse retiro del lugar, generando murmullos entre los vecinos.
Los tartagalenses no tardaron en demostrar su agitación por el hecho en las redes sociales, creando hipótesis hollywoodenses sobre la historia de la susodicha caja fúnebre, según informó El Tribuno.
Esto motivó a que la policía deba aclarar el hecho y el porqué del objeto en las instalaciones. Explicaron que se debía a la atención de un hombre que perdió la vida y cuyo cuerpo no fue reclamado por algún familiar.
Ante esto con la colaboración de la Municipalidad local, se solicitó el ataúd a Acción Social, siendo otorgado en la sede policial, para dirigirse al domicilio del sujeto fallecido.
Sobre esta defunción, se dio a conocer que se trata de Rodolfo Reino Omar de 70 años, quien fue hallado en la habitación que alquilaba en barrio Picapiedra, cerca de las 8 hs del jueves.
El hombre sufrió un paro cardiorrespiratorio que lo llevó a su muerte, también contaba con signos de desnutrición y un cuadro de hepatopatía etílico.
El dueño de la vivienda alquilada fue quien encontró en esta situación a su inquilino, quien no tenía familia, medico de cabecera, seguro de sepelio y era fumador.
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