Se trata de un hombre de 30 años que en primer lugar le robó a un corralón el cual era comprador asiduo y quedó identificado por las propietarias del mismo después que el hecho quedara registrado en las cámaras de seguridad. Las palas estaban ubicadas en la parte posterior del corralón y de ahí se las llevó.
Unos meses después, el mismo hombre fue captado por cámaras de seguridad en el barrio Hernán Figueroa mientras huía con una bomba de agua que había sustraído de una vivienda.
La vecina se dio cuenta que no tenía agua y al verificar si la bomba funcionaba se dio con que se la habían robado.
Por los hechos y tras un operativo policial, el hombre quedó detenido.
El hombre aceptó la responsabilidad en un juicio abreviado y fue condenado a un mes de prisión de ejecución efectiva y dejó sin efecto la condicionalidad de una pena anterior.
Por los delitos anteriores, el hombre quedará preso un año y dos meses en Villa Las Rosas.
Además, deberá realizar tratamiento por su adicción al alcohol.