



En diálogo con CNN Radio Salta, el director de la Fundación María de Guadalupe, Luis Arocha, explicó los resultados del informe realizado por Argentinos por la educación en conjunto con el Centro de Estudio de Desarrollo Humano de la Universidad de San Andrés, donde se explica cómo influye el nivel socioeconómico en el rendimiento de los chicos de las escuelas de Argentina.
“Las escuelas reciben a los chicos temprano todos los días y muchos de ellos vienen con mochilas cargadas de sueños, de historias, de deseos, de posibilidades, pero también de muchas historias de dolor, de frustraciones, de muchas vulnerabilidades y vos decís ¿Qué puedo hacer yo cuando el contexto es tan pesado?” comentó Arocha.
“La buena noticia del informe es que se puede hacer mucho”, señaló que muchas escuelas en el país están logrando buenos resultados en matemática y lengua a pesar del contexto complicado del alumno y para logarlo se tiene en cuenta muchos factores.
La buena formación docente, de los directivos, el clima escolar, como se dan los vínculos en la escuela, cuáles son los vínculos de respeto, la asistencia a salita de tres, un buen descanso en el hogar, si su alimentación es correcta, entre otros, ayudan a mejorar los resultados en materias.
Por otro lado, factores como la falta de libros en casa, una baja estimulación y demás, hacen que el rendimiento esté descendido: “En el país donde casi la mitad de los niños de tercer grado no entiende lo que lee, ahí encontrás que, en los contextos de mayor vulnerabilidad, es decir, donde no hay libros, donde hay papás que tuvieron menos oportunidad de estudiar, donde hay menor nivel socioeconómico, esos resultados son peores aún”.
“Desde Fundación Mario Guadalupe, llevamos adelante dos escuelas de barrios populares del conurbano, donde los chicos vienen de asentamientos y muchos de ellos de situación de pobreza. Cuando vos recibís esa realidad, tenés que lograr que ese chico logre el nivel esperado para su edad y tenés que formarte y buscar una manera de extender ese tiempo escolar y buscar la manera de colaborar con la familia y otras instituciones para que todos los días ese chico esté ahí” comentó.
“Un buen resultado en matemática o en lengua no llega por osmosis ni es responsabilidad entera del alumno”.
Uso del celular
Indicó la importancia de regularlo sobre todo en nivel secundario, donde la falta de reglas provoca la falta de atención del alumno: “Al chico cada tres minutos le está vibrando algo en el bolsillo y es muy difícil educar de esa manera”, mientras que en primaria prohíben directamente su uso.
“Hoy por hoy, que es una gran discusión, nosotros como escuela regulemos el uso de los dispositivos como los celulares que pelean por la atención de los chicos y en general ganan por goleadas” finalizó.








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