El transportista había ocultado 360 paquetes de hojas de coca entre pepinos y ajíes. Gendarmería detuvo su marcha en paraje Vallecito, Mendoza y fue ahí que detectó el cargamento. Todo fue decomisado.
El hombre había ocultado los fajos en parlantes y compartimento superior del rodado. No tenía aval de tan onerosa suma de dinero entre dólares y pesos argentinos.